Las obsesiones de un fotógrafo llamado Moby

  • La editorial Ivory Press ha dado la oportunidad al compositor Moby de compartir sus obsesiones fotográficas con sus fans. El libro `Destroyed´ muestra las horas insomnes del cantante, habitaciones vacías, hoteles, aeropuertos y pasillos, muchos pasillos. 

 Algunas estrellas del Pop como Michael Stipe, vocalista de R.E.M, o David Byme, de la banda escocesa Talking Heads, son conocidos tanto por sus éxitos musicales, como por sus fotografías. Richard Melville Hall, Moby, se une al elenco de músicos que comparten sus imágenes con el público y lo hace con rotundidad, presentando Destroyed, el libro homónimo de su último álbum, que recoge imágenes recopiladas a lo largo de más de 15 años de giras.  

La editorial Ivory Press ha dado la oportunidad a Moby de compartir sus obsesiones fotográficas con sus fans. Destroyed muestra las horas insomnes del cantante, habitaciones vacías, hoteles, aeropuertos y pasillos, muchos pasillos. Estos son algunos de los elementos recurrentes de un libro fotográfico, que muestra tanto el glamur como la soledad de las giras.  

La afición de Moby por la fotografía no es casual. Su tío, fotógrafo del New York Times, le regaló su primera cámara a los 10 años y el compositor pasó desde entonces muchas horas en el laboratorio, obsesionando con el arte del revelado y la composición. El cantante odiaba el olor de los químicos y, por eso, ahora está encantado con la fotografía digital. 

Moby no se considera un recién llegado al mundo de la fotografía. Tuvo muchos reparos a la hora de aceptar la proposición de la editorial para publicar su primer libro, si bien sus amigos le animaron y considera que sus horas de aprendiz de fotógrafo, en su juventud, le legitiman. 

Entre los fotógrafos que más le han influido destaca el glamur de Irving Penn y la fotografía documental de André Kertész, aunque Edward Steichen destaca sobre todos ellos, pues el catálogo recopilatorio de su obra era el único libro que había en casa de sus padres, y al artista lo grabó a fuego en su mente, reconociendo que esas aún le persiguen. 

Obsesiones, insomnio, jet lag y paisajes, son algunas de las imágenes recurrentes de este libro, que muestra también múltiples imágenes de sus fans, compartiendo la visión de Moby sobre los escenarios de medio mundo.

Texto Mónica Moyano | Fotos de Moby cedidas por Ivory Press
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