Este fin de semana pasado dio comienzo la Feria de Abril, el acontecimiento más esperado por los sevillanos y que tiene fans en todo el mundo. En estos días todas las miradas han estado sobre la ciudad hispalense, por la que pasean y disfrutan de la fiesta numerosos rostros conocidos. No obstante, entre todos ellos ha destacado uno que tenía una misión especial. Hablamos de la nieta más tímida del Rey Juan Carlos, la cual ya es toda una mujer y el pasado fin de semana fue la estrella de Sevilla al amadrinar el famoso concurso de Enganches de la Maestranza. Ella es Victoria Federica, la benjamina de la Infanta Elena y Jaime de Marichalar que ha eclipsado a la mayoría de personas que han paseado estos días por el real de la Feria.
La joven, que cumplió los 18 años el año pasado, debutaba este fin de semana como dama de la alta sociedad al ser la embajadora del certamen, pues además de por ser miembro de la Casa Real, Victoria es amante de los toros y los caballos desde pequeña, por lo que su elección era totalmente acertada. Así, el domingo hacía su entrada triunfal en la Maestranza de Sevilla en coche de caballos con mantilla color crema y un vestido en color mostaza realizado por el diseñador Enrique Rodríguez Hidalgo, el encargado de los looks de las madrinas de este evento en los últimos cuatro años.
Si bien este fue el colofón de un fin de semana que comenzaba el viernes en la cena del Museo de Carruajes, donde Victoria dio su primer discurso público ataviada con un look que ha despertado pasiones que bien podría haber sacado del vestidor de su tía la Reina Letizia. Un vestido largo rojo -el color fetiche de la soberana- de la diseñadora Vicky Martin Berrocal y unos pendientes largos en forma de hoja fueron suficientes para hacer brillar a la joven, cuya altura hace que todo lo que se ponga luzca perfecto.
Así, estos días han valido para confirmar lo que se venía ya gestando desde hace un tiempo: Victoria Federica es la nueva estrella de la familia real. Si la Reina Letizia es el icono de estilo absoluto de la monarquía española, su sobrina le sigue muy de cerca los pasos, ya que sus primas todavía son pequeñas aunque ya van dejando de detalles de lo que está por venir. La hija de la Infanta Elena tiene un estilo propio entre hippy y boho que complementa con detalles de lujo el cual le está encumbrando como toda una 'it girl'.
Amante de los toros y muy unida a su hermano
Victoria hasta hace muy poco era considerada la nieta más tímida y responsable de los reyes eméritos. Solo tenía siete años cuando sus padres se separaron, lo que le convirtió en inseparable de su madre, aunque manteniendo una relación muy fuerte con su padre. La Infanta, con la que ha vivido desde entonces, le inculcó sus mayores aficiones, los toros y los caballos, haciendo de ella una pequeña jinete que apuntaba maneras en los concursos de salto.
Además, empezó a acompañarla a ella y a su abuelo a las plazas de toros de toda España, lo que hizo que creciera en ella una afición que mantiene a día de hoy, al igual que su hermano Froilán, al que está muy unida. De hecho, comparten pandilla de amigos, entre los que está el torero Gonzalo Caballero, con el que se rumorea que Vic -como le llaman sus amigos- mantiene algo más que una amistad. Son habituales las fotos en redes sociales siguiendo al diestro por las plazas de toros e incluso en tentaderos privados. Por el momento, ni confirman ni desmiente este noviazgo, que sería el primero para la nieta de los reyes.
En el tema de estudios, Victoria estudia el segundo curso de bachillerato a pesar de que ya tendría que estar en la Universidad. De pequeña estudió en el Colegio San Patricio de La Moraleja, si bien sus padres le enviaron dos años a un internado en Reino Unido, del que regresó para cursar el bachillerato en en el St. George's School de Madrid, lo que le retrasó un curso. Ahora se encuentra preparando precisamente las pruebas de acceso a la Universidad.
Si de su madre tomó el amor por la cultura nacional, ha sido su padre, Jaime de Marichalar, quien le ha ayudado a componer su particular estilo. Porque el que fuera duque de Lugo es consejero de firmas de lujo como LVMH y es uno de los hombres más elegantes del panorama nacional. De hecho, tiene su propia marca de trajes sastre. Por ello, ha ido inculcando a su hija nociones de estilo que Victoria ha hecho suyas. Así, es habitual verla con detalles como el mítico bolso 2.55 de Chanel o zapatos Manolo Blanhik, como sucedió el pasado fin de semana en la Maestranza, los cuales combina con sus vestidos y turbantes más hippies.
Lo del pasado domingo fue el aperitivo de lo que está por venir. Victoria se ha convertido en la nueva 'niña bonita' de la familia real y ha conseguido incluso eclipsar a su hermano, que era el que acaparaba los titulares hasta hace poco por sus entradas y salidas. La joven, mucho más discreta, ha creado un halo de misterio a su alrededor que ha despertado el interés de propios y ajenos. Y a la sombra de Letizia.
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