El joven miembro de One Direction quiso empezar el 2013 con un regalo muy especial para su pareja, con quien empezó un mediático romance hace dos meses. Aprovechando sus vacaciones navideñas en su país natal, Harry eligió para Taylor una pulsera vintage de esmeraldas en una joyería de segunda mano cercana a su casa de Cheshire, al noroeste de Inglaterra."Harry eligió personalmente el regalo para Taylor cuando estuvo en su casa. Encontró [la pulsera] en una tienda de segunda mano y a ella le sorprendió mucho cuando la recibió. Harry esperó a llegar al hotel en el que se hospedaban en Nueva York para dársela durante el Día de Año Nuevo. Está como loco por Taylor e incluso le dijo que la quería cuando estuvieron en la Gran Manzana", señaló una fuente al periódico The Sun.El cantante inglés quiso estar a la altura de los regalos con que ambos han celebrado algunas fechas señaladas, como un bolso de Jimmy Choo que Harry le compró a Taylor por su 23 cumpleaños o las piezas de coleccionista de la discografía de los Beatles en las que Taylor se gastó 60.000 euros (80.000 dólares) en las pasadas Navidades.Además, la pareja celebró junta su primera Nochevieja besándose en público en Times Square, donde Taylor actuó en el Dick Clark's New Year's Rockin' Eve. Cuando la joven bajó del escenario, sorprendió a todos los presentes con la apasionada muestra de afecto con el británico, quien llegó a tiempo para ver la actuación de su novia después de asistir al concierto de Coldplay y Jay-Z en Brooklyn.
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