La 'bendita normalidad' que celebraba Sara Carbonero en redes sociales hace unas semanas cuando Iker Casillas estaba ya fuera del hospital tras su infarto de miocardio vuelve a instalarse en su vida después de que hace unos días tuviera que ser ella la que sufriera un problema de salud grave. La periodista tuvo que ser intervenida de urgencia para extirparle un tumor maligno en el ovario, una noticia que conmocionó a la opinión pública y que llenó de tristeza a la familia, que pasa por uno de sus peores momentos.
Pero ahora toca ponerse fuertes, como indicó la propia Sara nada más salir del hospital, y para ello nada mejor que una escapada al lugar donde la pareja siempre recarga pilas en plena naturaleza y rodeados de los suyos. Ahora que han vuelto a instalarse en Madrid, en su chalet de la prestigiosa urbanización La Finca, su lugar favorito en plena sierra de Ávila les queda muy cerca, por lo que, aprovechando el buen tiempo del pasado fin de semana, la familia al completo se ha marchado a Navalacruz.
Se trata del pequeño pueblecito abulense del que procede la familia de Iker y donde él ha pasado todas sus vacaciones desde que era pequeño. Sus lazos con esta localidad de apenas 250 habitantes son tan estrechos que en 2010, cuando ganó el Mundial de Sudáfrica, fue nombrado Hijo Predilecto de Navalacruz, y es su mejor embajador. Por ello, no duda en visitarlo cada vez que puede, ahora acompañado de toda su familia, que también pasa buena parte de los veranos allí.
Así, estos días Iker y Sara han vuelto a refugiarse allí tras las duras semanas vividas coincidiendo además con la feria medieval que celebraba el municipio. Además, también han aprovechado para festejar el tercer cumpleaños de su hijo Lucas, al que la periodista dedicó un emotivo post en Instagram donde le daba las gracias por haber llegado a sus vidas para hacerlas mejor. Un pequeño 'superhéroe' que es mu distinto al mayor, Martín, y que les conquistó desde el primer momento.
Este aniversario no quisieron perdérselo los amigos más cercanos de la pareja, la periodista Isabel Jiménez y su marido, Álex Cruz, que viajaron hasta Navalacruz para pasar estos días con la pareja y sus hijos. Isabel fue madre del pequeño Hugo hace apenas dos meses, por lo que también son momentos especiales para ella, que comparte con Sara la empresa de moda y estilo de vida 'Slow Love', que acaba de sacar una colección de moda sostenible por primera vez.
Así, todos juntos estuvieron disfrutando de la feria medieval, de paseos por la sierra abulense y de los conciertos que tuvieron lugar en estas fiestas del pueblo. Actividades de las que dejó constancia Sara en sus redes sociales con motivadores mensajes que demuestran que está viviendo todo este proceso con naturalidad y con el convencimiento de que todo va a salir bien.
En los próximos meses Sara tendrá que someterse a un tratamiento para erradicar completamente su enfermedad, pero tiene a su lado una gran familia y muy buenos amigos que van a ser su mejor sostén para afrontarlo con todas sus fuerzas.
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