James Bond se vuelve políticamente correcto

    • En la nueva novela de James Bond,el espía tendrá una novia estable y un amigo abiertamente gay.
    • El agente secreto moderará sus conductas para adaptarse a la moral del siglo XXI.
James Bond se vuelve políticamente correcto
James Bond se vuelve políticamente correcto

Durante décadas el espía 007 se ha vanagloriado de ser un conquistador, ser un gran fumador y de salvar el mundo. Ahora, sin embargo, moderará sus conductas para adaptarse a las correcciones políticas del siglo XXI. En la nueva novela de James Bond, el agente secreto tendrá una novia estable y un amigo abiertamente gay.

El autor, Anthony Horowitz aseguró que no quería tocar el carácter del personaje de los años 50, aunque quiere modernizar su personalidad a la moral de los 2000. Pero sí que incluirá un amplio elenco de personajes que le señalará sus comportamientos pasados de moda que le advertirán sobre el riesgo de padecer cáncer por culpa del tabaco o mujeres que le darán lecciones de economía.

Horowitz ha tenido acceso a las notas del autor original Ian Fleming para el desarrollo del personaje. Asegura que ha procurado mantener el espíritu de James Bond vivo en la nueva novela "Trigger Mortis", aunque haya insertado "pequeños giros" para que la historia funcione en los tiempos actuales. "El libro refleja el verdadero carácter que los fans quieren recordar", aseguro el autor en declaraciones al diario británico 'The Telegraph', pero luego alguien le da "un codazo" hasta que dice "espera un minuto"."Estás viviendo en el siglo XX no enla Edad Media"

Entre las sorpresa que se encontraran los seguidores se encuentre el regreso de Pussy Galore quien se ha mudado con el espía a Londres con quien discute por las mañanas en una vida muy lejana a lo idílico del Bond primitivo. De hecho, uno de los retos de la transformación de la novela al siglo XXI fue precisamente el personaje de Galore, que en la novela original era una lesbiana reconvertida gracias a la potencia sexual de 007.

"Fue un verdadero reto. ¿Cómo podía conservar el concepto de la obra original y al mismo tiempo no ofender a la gente del siglo XXI?", se preguntó Horowitz. "Añadí un personaje gay que le recordaba a su amigo Bond que 'estás viviendo en el siglo XX no en la Edad Media'".

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