Javier Mariscal: "Gracias a Dios mi obra no está en ningún museo"

  • El diseñador Javier Mariscal ha dicho hoy que la importancia que le otorga a su trabajo es que le "da de comer" y que le permite "tirar para adelante", tras comentar que "gracias a Dios no está en ningún museo".

Bilbao, 30 sep.- El diseñador Javier Mariscal ha dicho hoy que la importancia que le otorga a su trabajo es que le "da de comer" y que le permite "tirar para adelante", tras comentar que "gracias a Dios no está en ningún museo".

Mariscal ha inaugurado hoy en la Sala BBK de Bilbao junto al dibujante Nazario el festival "La risa de Bilbao", una semana dedicada a la literatura y arte con humor, en la que el dibujante ha repasado su carrera desde que los dos protagonizaron en los setenta la Barcelona "underground".

El autor ha explicado que él siempre ha intentado "romper y tratar de inventar, coger riesgos". De ahí el rechazo a la permanencia en una sala de exposiciones: "No estar en un museo te suelta lastre. Vas como muy suelto".

"El otro día me vinieron los de HM y me dijeron que la tienda que les diseñé en Barcelona les encanta, pero han pasado seis años y hay que renovarla, y con la crisis van a hacer una tienda como todas. Han ganado los 'márketing'. !Qué le vamos a hacer¡. Cuando se destruyó el primer bar que diseñé lloré mucho, ya no", ha comentado.

En esta defensa de la evolución, Mariscal ha afirmado: "Los gráficos somos hijos de los primeros hombres primitivos, que empezaron a desarrollar un trabajo de signos. Muchísimo después llegaron los alfabetos. La comunicación arrancó con las marcas, los signos, y yo continuamente intento estirar ese lenguaje, ponerlo al día".

Mariscal está muy orgulloso de Cobi, la mascota de los juegos de Barcelona 92, y 21 años después, ha elogiado a "Cobri", el sucedáneo que surgió en las redes sociales con motivo de la candidatura de Madrid: "Es muy gracioso y muy preciso".

A Mariscal le habría "encantado" que le dieran los Juegos de 2020 a Madrid, aunque para "poder decir -ha precisado- que íbamos a ser transparentes y gestionar bien el dinero público".

"¿Cómo se puede ir a pedir los Juegos Olímpicos si cinco atletas españoles tuvieron que pagarse de su bolsillo el viaje a Berlín a una competición?", se ha preguntado el artista valenciano.

"Los del COI no son tontos, los Juegos tienen mucho valor, es su negocio, no se lo van a entregar a unos que de entrada el más jefe de todos (por Rajoy) es un mentiroso, que tiene cero, cero de confianza en su país, que está recortando en todo", ha proseguido.

En Japón (vencedor con Tokio), ha recordado Mariscal, "no han pillado a ningún japonés drogándose y luego saben mucho de negocios, tienen mucho dinero, allí no hay un bache".

Precisamente, en Japón es en donde Mariscal desarrolla uno de sus proyectos actuales, una casa que se va repetir muchas veces, además de una exposición en Seúl. En cambio, está intentado escribir un guión de una película, "pero no hay manera".

Mariscal también ha recordado sus inicios con Nazario, cuando los dos tenían veinte años y dibujaban cómic "underground", y ha bromeado que "con la democracia no era lo mismo: 'El Víbora' (mítica revista) ya no era 'underground', era con depósito legal, todo legal".

"Éramos cuatro y estábamos como debajo de las piedras. Era muy 'underground'. Hoy en día, por ejemplo, el 15-M tiene unos altavoces bestiales, es fascinante que haya estos medios", ha resaltado.

Su conclusión en una semana sobre el humor en la cita de Bilbao: "Hay que reírse, es muy importante. Los jesuitas leí que lo tenían prohibido, que era como del diablo, bienvenido sea el diablo".

La presencia de Mariscal ha servido también para inaugurar una exposición dedicada a la obra de Robert Crumb, el rey del cómic "underground".

En la muestra, se pueden ver un centenar de planchas originales de uno de los dibujantes más influyentes de la historia del cómic, acompañadas por una muestra del catálogo de La Cúpula, la editorial de Crumb en España.

Mariscal ha comentado que se ha emocionado con la muestra, porque "Crumb es Dios".

"Alguien con una personalidad bestial, con grandes aciertos, es como Woody Allen: hay que darle las gracias por abrirnos los ojos, por los buenos ratos, porque gracias a sus paranoias entiendes mejor este mundo, que eso es el arte", ha elogiado.

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