El Prat de Llobregat (Barcelona), 21 ago.- El tenor alemán Jonas Kaufmann, considerado uno de los más excepcionales de su generación, cerrara mañana el Festival de Perelada con una gala de repertorio amplio y destacadas arias, un evento que ha calificado de "reto" y oportunidad para "difundir el virus de la ópera".
A su llegada hoy al aeropuerto de Barcelona-El Prat, el tenor lírico ha explicado que no quiere que se le considere un cantante alemán que canta en alemán o en italiano, sino "un cantante que canta todos los repertorios".
Kaufmann ha ofrecido una rueda de prensa en el mismo aeropuerto poco antes de desplazarse a Peralada, en Girona, para ensayar con la Orquesta de Cadaqués el único concierto que ofrecerá este año en España con arias de Verdi, Wagner, Bizet, Mascagni o Giordano, entre otras.
En su opinión, en las galas se muestran aspectos diferentes del gran repertorio y son una oportunidad para incitar a los espectadores a ver después toda la historia, "ir a los teatros de la ópera y comprar entradas".
Ante la crisis que afecta a la artes, sobre todo en Europa, ha recomendado que los recortes que se están haciendo en cultura sean "racionales", porque, "cuando hay dinero público, la cultura está en peligro", discusión similar a la que se produce en Alemania, en donde, aunque "hay mucha ópera, se están cerrando la mitad de los teatros".
"Ya ha pasado el tiempo en que la ópera se consideraba un instrumento político, es lúdico y para cargar baterías", ha apostillado.
A Kaufmann le gusta cantar y le gustaría seguir cantando "porque -ha dicho- es mi pasión", pero no quiere ser "el tenor del momento, sino un tenor a largo plazo" y "no se trata de coger el primer tren, sino el segundo, quizás el más largo, y también de saber decir que no".
El tenor tiene una gran calidad lírica, con técnica y flexibilidad, y una voz que le permite interpretar papeles más dramáticos, desde Verdi a Wagner, de los que puede cantar una voz puramente lírica, han explicado a Efe fuentes del festival.
Aun así, sabe que "una cosa es el sueño y otra la realidad" y, aunque en su carrera se halla "cerca del sueño", tiene que "ralentizar y tomárselo con calma", ha dicho, y papeles como Tristán y Otelo "tienen que esperar, aunque sean tentadores", porque "no hay que hacer grandes pasos ni construir la casa por el tejado".
Kaufmann cantará por primera vez en España el papel de Don José, de la ópera "Carmen", de Bizet, un rol que ha interpretado en varios escenarios internacionales destacados, aunque no se considera "un macho español de navaja".
Cuando paseó por Sevilla, al lado de la plaza de toros de la Maestranza, imaginó a Don José paseando por aquellas calles, ha dicho a preguntas de Efe sobre sus sentimientos en torno a la popular ópera recreada en España.
Carmen "es una música fresca" y, si se invita a personas que nunca han ido a la ópera a verla "dicen 'sí la conozco y volveré al teatro'".
Sobre las puestas en escena transgresoras, el divo ha dicho que no se puede ir hacia atrás, pero tampoco hacer algo diferente para "satisfacer los egos de los directores", porque "no podemos alejarnos de la música y el texto".
El cantante alemán es uno de los platos fuertes de la 26 edición del Festival de Peralada, que se cierra mañana en el auditorio del parque del castillo, con un cartel en el que se han ofrecido, desde el 17 de julio, diecisiete espectáculos y diecinueve representaciones de ópera, música y danza.-
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