La coproducción borra las fronteras geográficas del mercado audiovisual

Marta Garde.

Cannes (Francia), 8 abr.- Las necesidades financieras de las compañías audiovisuales han aupado a las coproducciones como una opción al alza en el MIP TV de Cannes, que permite constatar cómo se han unido sensibilidades, borrado fronteras y elevado la calidad.

El fruto de esa colaboración creciente se puede ver no solo en series de éxito consolidado como la europea "Borgia", sino en apuestas que saldrán próximamente al mercado, como "Rogue", de la alemana Tandem Communications, la estadounidense Bernero Productions y la francesa TF1.

A nivel español, uno de los grandes proyectos recae por su parte en "Las aventuras del capitán Alatriste", adaptación de la saga literaria de Arturo Pérez-Reverte, cuyo rodaje está previsto para junio, de la mano de Mediaset España y de la productora alemana Beta Film.

"La llave del éxito está en asociarse antes de que el programa se crea. Coproducir no es nuevo, pero lo que sí es nuevo es crear programas que tienen éxito internacional", resume para Efe Laurine Garaude, directora de televisión de la organización que maneja los hilos de la feria, Reed MIDEM.

Diversos paneles dedicados exclusivamente a analizar ejemplos de coproducciones y un encuentro que en la inauguración este lunes reunió a unas 60 figuras de la industria para abordar cara a cara las posibilidades de esa experiencia demuestran cómo la unión de fuerzas es una alternativa que ha dejado de ser secundaria.

"Es complejo porque el idioma puede parecer una barrera para producir con mercados como el de centro Europa, los nórdicos o los de habla inglesa, pero tenemos la fortuna de que el contenido a veces unifica universalmente el lenguaje", explica a Efe el director de la productora Globomedia, Daniel Écija.

Cuando se habla de coproducción, a su juicio, se habla de "trabajo en equipo y de ser muy permeable y tolerante", y de tener claro que aunque un gran director o una estrella te facilitan el camino de la mercadotecnia, "la clave es tratar de satisfacer y emocionar al público, que es para el que trabajamos".

Su grupo, que está detrás de series como "Águila Roja" y "Aída", alcanzó en mayo del año pasado un acuerdo con Televisa para crear una productora televisiva con la que poner en marcha nuevos proyectos en España, además de gestionar las producciones de la compañía mexicana en España y el catálogo de ficción de Sony.

Coproducir "es una oportunidad, y ahora, según estamos en España, y voy a decirlo medio en broma, casi una necesidad", añade Écija, que dice seguir buscando nuevos "compañeros de viaje" que permitan "mantener una industria de miles de personas".

Y en esta vía creciente, las únicas beneficiadas no son solamente las productoras, sino también los seguidores de las series que por problemas de presupuesto se acaban cayendo de la parrilla antes de tiempo.

"Mandar un mensaje de que se van a producir varias temporadas de una serie es muy estimulante para los espectadores", relata para la revista diaria de MIP TV Brian McGreevy, coguionista de la serie "Hemlock Grove", que va ya por su segundo año.

En el fondo, según él, el visionado tiene mucho que ver con la sensación de compromiso que perciba la audiencia, en un momento en que la rápida caída de muchas series ha creado un ambiente de escepticismo, en el que el espectador puede que no decida apostar por algo, si no tiene la garantía de que se cuenta al menos con una temporada finalizada.

Dada la coyuntura, una vez que se cuenta con el talento, las capacidades y la gente, según han transmitido los expertos presentes en el MIP TV de Cannes, la colaboración entre empresas competidoras es una obviedad abrazada por la industria como una manera más de conseguir el objetivo de sobrevivir y narrar historias.