La Habitación Roja: "Pasamos las de Caín para seguir adelante"

No sé quiénes están más contentos con el disco Fue eléctrico, si el quinteto valenciano La Habitación Roja o los miles de fans que han logrado cosechar desde 1997. El grupo lo lanzaba el pasado 20 de febrero, aunque antes lainformacion.com sacaba cinco temas en exclusiva que ponían aún más nerviosos a los seguidores de la banda. El caso es que desde entonces abundan los alabos, halagos y felicitaciones por los 11 temazos que componen el disco. "Estamos todo muy contentos, aunque lo vivimos un poco con una alegría contenida porque si hace 10 años nos hubiera pasado esto a lo mejor no se nos podría ni toser", dice Jorge Martí, la voz de la banda. José Marco, el batería, le escucha de cerca muy atento.

Fue eléctrico suena 100% La Habitación Roja: canciones vibrantes, con gran tensión emocional y con estribillos muy populares. El álbum se ha grabado en los Estudios Ultramarinos de Santi García y hay muchas expectativas puestas en él. "Yo de lo que sí tenía muchas ganas aunque a lo mejor suena un poco naïf o inocente era de que la gente escuchese las canciones porque es como compartir con ellos una parte de ti y a partir de ese momento ya dejan de ser tuyas. Ahora es cuando estamos viendo alejar a esos hijos que se van a vivir su vida y viene la fase del directo", relata Jorge.

Para el cantante, "lo más bonito de este disco es que no es un trabajo premeditado para gustar a nadie, es un disco liberador en el sentido en que nos hemos juntado con un tipo de material que coincide con lo que la gente está esperando de nosotros. Es como que se han aliado los astros sin buscarlo y ha dado la casualidad. Se podía haber dado hace ocho discos, hace tres... pero se ha dado ahora. Tengo también claro que no va a ser un éxito masivo, pero sí creo que va a significar un afianzamiento de nuestra propuesta".

La Habitación Roja ha estado durante dos años enteros trabajando en estas canciones, que se grabaron a finales de noviembre. Dese entonces, el grupo ha ido creando bastante expectación a través de diferentes canales.

"La verdad es que ha sido bonito, también he pensado mucho sobre lo que hubiera sido sacar este disco en otra época. Una época en la que hasta que no ibas a la tienda y lo comprabas no lo podías escuchar y no había adelantos de esta manera. Era todo no sé si más emocionante, pero sí había más suspense. Ahora como que todo el mundo lo queire ya está a un click. Pero aún así, hemos conseguido crear cierto suspense", relata Jorge.

Entre las canciones del disco, las favoritas de los componentes varían mucho y sus gustos parecen ser de lo más ecléctico. A Jose cada día le gusta una, pero su favorita es Annapurna desde que Jorge se la mandó en acústico. La de Jordi es El resplandor, la de Marc es Indestructibles, la de Pau es Norgue y a la de Jorge, La segunda oportunidad. Curiosamente ninguno ha escogido el single de presentación: "El single es el single, es la más inmediata del disco, la más reconocible. Es una adaptación con la que es fácil empatizar y habla de algo que pasó ayer mismo que le ha podido pasar a cualquiera", afirman.

"Desde el principio tenía muchas virtudes que la hacían ser el single, en ella hemos introducido algunos elementos más discotequeros y nos parecía que era la primera canción pinchable de nuestra historia. Pero, no creo que sea la mejor canción el disco ni la más representativa", añade el vocalista.

La importancia de la redes sociales

La campaña, por denominarla de alguna manera, del lanzamiento del disco ha sido también bastante original y ha dado mucho protagonisto a los fans. "Lo bueno de las redes sociales, lo estamos viendo ahora con todo lo de las revueltas, es que no necesitamos tanto a la crítica o a la prensa, a los poderes fácticos de la música para expandir nuestra propuesta y que la gente con el boca a boca puede crear una tendencia y extender un mensaje".

Quizás es por eso que La Habitación Roja ha mostrado su lado más solidario con la bajada del precio de las entradas de sus conciertos y también el de sus discos. "Somos obreros del rock y pasamos las de Caín para seguir adelante, también tenemos amigos y familiares que no lo están pasando bien y somos conscientes de que más del 50% de la juventud está en paro en este país y por mucho que le guste tu grupo no es el único grupo que hay y la verdad es que necesitas poner los pies en la tierra", relata La Habitación Roja. "Es una medida que nos ha salido de dentro, no es una medida populista. Es una cuestión de solidarizarnos con la gente porque tiene la necesidad de escuchar música", afirma Jorge.

Cada uno en un sitio

La pregunta del millón, ¿cómo se las arregla esta banda viviendo cado uno en una ciudad diferente? "Gracias a internet", afirma José. "Y con muchas ganas", añade Jorge, que vive nada menos que en Noruega.

"Me parece bastante mágico y estimulante que yo me entere de todo lo que pasa en Barcelona porque Jordi vive en Barcelona y está en contacto con otros grupos, me entero de todo lo que pasa en Valencia por Jose y por Marc y me entero de todo lo que pasa en Madrid por Pau, que además toca en otros grupos, y en ese sentido hay un 'feedback' ahí musical súper importante y nos enriquecemos mutuamente. Yo vivo un poco aislado, pero bueno, ese aislamiento también a veces es positivo para la composición. Hemos aprendido a funcionar de esta manera, que hace que cuando nos juntamos nos juntamos con más ganas, concentramos el trabajo y se hace más productivo y también estamos más tiempo con nuestras familias o haciendo otras cosas. Solemos mandarnos archivos, ideas... y cuando nos juntamos todo el mundo sabe por dónde van ya un poco los tiros", afirma el cantante.

"En vez de ensayar dos horas cada día lo que hacemos es quedar 10 días seguidos y ensayar de 10 a 2 y de 4 a 8, un horario de oficina. De ahí salen muchas cosas que luego nos volvemos a llevar a casa para reflexionar y luego volvemos a reunirnos para dar los toques finales", concretan.

Los Postal Service españoles

Los integrantes del grupo The Postal Service vivían cada uno en una costa del país y se mandaban las cintas por correo y de ahí viene precisamente su nombre. Pues bien, si hoy no exixtiera internet, La habitación Roja les copiaria la idea. "Haríamos las cosas así, y alguna vez nos hemos mandado cintas en otra época". De hecho, José confiesa que tiene la letra de un tema que Jorge le envió por correo en una postal que todavía conserva.

Para Jorge, "una de las virtudes del grupo eslo cabezón y lo ostinado que ha sido y lo comprometido que siempre ha estado con este proyecto común que tenemos. Los caminos de cada uno no han sido capaces de terminar con este grupo. Cualquier pareja no hubiera aceptado que cada uno viviera en un país distinto o en una ciudad. Probablemente hubiera fracasado y yo creo que si no ha sido así es porque hay mucho amor".