La luz negra del pintor José Orús protagonista de una retrospectiva

  • Rubielos de Mora (Teruel).- El pintor José Orús expone en el Museo de Rubielos, en la provincia de Teruel, una retrospectiva de su obra caracterizada por la luz negra, una iluminación externa al cuadro que literalmente "enciende" sus obras, de referencias cósmicas.

La luz negra del pintor José Orús protagonista de una retrospectiva
La luz negra del pintor José Orús protagonista de una retrospectiva

Rubielos de Mora (Teruel).- El pintor José Orús expone en el Museo de Rubielos, en la provincia de Teruel, una retrospectiva de su obra caracterizada por la luz negra, una iluminación externa al cuadro que literalmente "enciende" sus obras, de referencias cósmicas.

José Orús (Zaragoza, 1931), perteneciente a la generación que trajo a España el arte abstracto, expone por primera vez en Teruel y lo hace con una retrospectiva abierta en el Museo Salvador Victoria de Rubielos de Mora, en la que se pueden ver obras de todas las etapas de este artista, desde 1950 hasta 2010.

Hay que remontarse a 1998 para encontrar una retrospectiva similar de este pintor, la antológica que se presentó en el Museo Español de Arte Contemporáneo de Madrid.

El director del Museo Salvador Victoria, el escultor Diego Arribas, destacó en la presentación que esta es la exposición número veinte organizada en los siete años de existencia de este centro de arte, uno de cuyos objetivos es dar a conocer la obra de los artistas de la mítica generación de la Vanguardia de 1950.

A esta generación pertenece el pintor Salvador Victoria, que impulsó la creación de este museo, ubicado en un edificio del siglo XVIII y en el que se exhibe de forma permanente tanto obra suya como de sus compañeros de generación: Tapies, Pablo Serrano, Millares, Lucio Muñoz, Manuel Rivera, Genovés, Canogar, Martín Chirino o Elena Colmeiro.

La luz negra es la principal contribución de Orús a la búsqueda de nuevos materiales y lenguajes plásticos de esta generación, en opinión de Diego Arribas.

"Esta luz produce un efecto vibrante en la materia", ha explicado Aribas, que se ha referido a los pigmentos luminiscentes que prepara el propio artista con elementos naturales y cuya composición mantiene en secreto.

Los cuadros normalmente reciben la luz del exterior y "José Orús lo que consigue, mediante la radiación ultravioleta, es que la luz emane de la superficie del cuadro después de ser absorbida, hasta tal punto que si se apaga, los cuadros siguen encendidos", ha añadido.

De la generación de 1950, Manuel Rivera aportó la tela metálica a sus obras; Millares la arpillera; Lucio Muñoz, la madera, y Tapies la marmolina, la tierra y otros materiales.

"José Orús introdujo primero las pinturas metalizadas, con pigmentos color dorado, bronce y plata. Y en otra vuelta de tuerca, amplió el repertorio de materiales plásticos con uno que no lo es, que es un material industrial, un material reflectante", ha explicado Diego Arribas.

Las obras que se exponen proceden de colecciones privadas y han sido seleccionadas por Desirèe Orús, hija del artista, que asistió también a la presentación, junto con su padre y el presidente de la Asociación Aragonesa de Críticos de Arte (ACCA), Manuel Pérez Lizano.

De los primeros años, se exhiben varias obras informalistas, que dan paso a la etapa de 1960-1970 en la que el artista incorpora los colores metalizados, para evolucionar a partir de 1970 y de unos meses en EEUU a las obras con "luz negra" de sus "mundos paralelos", en las que sigue trabajando.

Desirèe, vicepresidenta de la AACA, subrayó que el cuadro "con luz blanca tiene una realidad, pero con la luz negra cambia, vemos otra realidad paralela, al romper el espacio-tiempo". Y esto es lo que sorprende enormemente al espectador.

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