"La mula", paralizada desde 2010, logra vía libre para buscar distribuidora

Madrid, 19 nov.- La producción española "La Mula", cuya llegada a la salas estaba paralizada desde 2010 debido a una infracción a la Ley del Cine, ha logrado vía libre para buscar distribuidora, a raíz de una sentencia de la Audiencia Nacional.

La resolución judicial da la razón a la productora española de la cinta, Gheko Films, y desestima el recurso interpuesto por el abogado del Estado, en representación del Ministerio de Cultura.

El abogado del Estado interpuso una demanda por la concesión que obtuvo la película de calificación por edades, así como su atribución de nacionalidad española.

Los motivos del Ministerio eran que el proyecto había sufrido alteraciones en su equipo técnico original, desde que Gheko Films solicitara en 2008 la aprobación al Instituto de la Cinematografía y de las Artes Audiovisuales (ICAA), y en 2010 la calificación por edades.

Unos cambios de los que no informó la productora a la Administración, y que afectaron al director original, Michael Radford, al que hubo que sustituir tras su abandono cuatro días antes del último claquetazo en 2009 por desavenencias en materia de derechos de explotación con la productora española.

Además desaparecieron uno de los guionistas, el director de fotografía y el compositor de música, y se omitieron datos relativos al presupuesto.

El Ministerio alegaba que estos cambios lesionaban el interés público, pero el juez de la Audiencia Nacional considera, y así lo hace constar en la sentencia, que no es motivo suficiente para denegarle a "La mula" su nacionalidad española.

De hecho esta modificación del personal incluso "incrementa la participación española en la producción", tanto en el aspecto económico, técnico y artístico.

"La mula", una historia ambientada en la Guerra Civil española y basada en la novela homónima de Juan Eslava Galán, ha sido coproducida también por los institutos de cine de Inglaterra e Irlanda.

Desde que finalizara el rodaje en verano de 2009, el proyecto ha sido objeto de varias querellas entre las partes responsables del mismo: la propietaria de Gheko Films, Alejandra Frade, interpuso una demanda a Radford porque éste les exigió que le cedieran los ingresos en España y los internacionales a cambio de una libra.

Mientras Radford acusó a Gheko Films por estafa al no reconocer sus derechos de autor e impedir que las productoras británicas recibieran las subvenciones concedidas.