La música clásica celebra el centenario del nacimiento de Ataúlfo Argenta

Miguel Ramos.

Castro Urdiales, 18 nov.- Tal día como hoy hace cien años nació en Castro Urdiales (Cantabria) el director de orquesta Ataúlfo Argenta, quien con su batuta condujo 40 orquestas fuera de España, ofreció 720 conciertos y manejó un repertorio de 600 obras entre zarzuelas y piezas de Brahms, Schumann, Stravinsky o Schoenberg.

Su repentina muerte, a los 44 años de edad en un accidente de coche, silenció una carrera profesional que comenzaba a brillar en la Europa de mediados de siglo XX y que le impidió forjar aún más su talento entre los directores más representativos de la historia de la música.

La capacidad que poseía Ataúlfo Exuperio Martín de Argenta Maza para sentir la música y transmitirla tanto a sus intérpretes como al público de los auditorios se ha homenajeado durante todo este año en su ciudad natal a través de conciertos, exposiciones y seminarios didácticos.

"Castro Urdiales era mi padre, y paseó con orgullo por todo el mundo el nombre del municipio", recordaba esta mañana una de sus hijas, María Ángeles, quien junto a su hermana Margarita ha asistido a la clausura de este mágico centenario en el que se han volcado instituciones, empresas y vecinos de la villa.

La familia Argenta agradece el cariño recibido durante este año y todos los actos celebrados en honor al maestro castreño y, sobre todo, que los jóvenes del municipio hayan podido conocer de primera mano quién era Ataúlfo Argenta, porque "ellos son el futuro", subraya María Ángeles.

El alcalde de Castro Urdiales, Iván González, ha mostrado su satisfacción con los más de 45 actos que han servido para recordar el nombre de su vecino más ilustre y por la respuesta del público.

"Con muy pocos medios económicos se han organizado muchas cosas", y, gracias al "trabajo duro de todos", esta localidad cántabra se ha convertido en un referente de la música de cámara y de orquesta, reconoce el regidor.

Castro Urdiales ha acogido desde enero una exposición dedicada a su director de orquesta más internacional, compuesta por fotografías, recortes de prensa, discos y todo tipo de recuerdos y documentación escrita y sonora.

Asimismo, los muros de la iglesia gótica de Santa María de la Asunción se han hecho eco de las voces y notas musicales de agrupaciones como el Orfeón Donostiarra, la Orquesta Sinfónica de Bilbao, la Camerata Coral de la Universidad de Cantabria, el Coro de Voces Graves de Madrid, el Coro y Orquesta de Cámara de Bilbao y el Orfeón Cántabro.

Paralelamente, jóvenes bandas de música clásica, solistas con instrumentos de viento y cuerda y compañías de ópera y zarzuela han participado en el II Ciclo Musicastro Classic.

Las notas musicales también se entremezclaron con el sonido y el olor del mar gracias a conciertos celebrados al aire libre en algunas de las zonas más características de la villa costera de Castro Urdiales.

Y los más pequeños han tenido su primera toma de contacto con la vida Ataúlfo Argenta a través de un espectáculo titulado "La batuta mágica", en el que se ha combinado teatro, música y proyecciones audiovisuales para repasar la trayectoria artística del director cántabro.

Además, el programa de actos para realzar la efeméride ha contado con un seminario de Canto Abierto dirigido a coros y cantores individuales, así como conferencias, recitales de poesía y la proyección de una película de cine mudo con pianista acompañante, tal y como lo ejecutaba Ataúlfo Argenta en su edad adolescente los domingos en el teatro de Castro Urdiales.

Todo ello para conmemorar el legado cultural que ha dejado este maestro de la música, gracias a su esfuerzo, trabajo, constancia, sabiduría, talento y brillantez.