La tecnología muestra en Bilbao el Friso del Partenón sin daños y a color

  • Una copia del Friso del Partenón puede contemplarse en el Museo de Reproducciones Artísticas de Bilbao sin los desperfectos que presenta la obra original y con la policromía recuperada, gracias a un sistema interactivo desarrollado por el centro de investigación Tecnalia.

Bilbao, 24 dic.- Una copia del Friso del Partenón puede contemplarse en el Museo de Reproducciones Artísticas de Bilbao sin los desperfectos que presenta la obra original y con la policromía recuperada, gracias a un sistema interactivo desarrollado por el centro de investigación Tecnalia.

Con este sistema, basta con que el visitante acerque su mano a la obra para que aparezca sobre la propia pieza una proyección que "completa" las partes inexistentes o deterioradas y añade colores al conjunto.

El resultado es "magnífico" ya que "ver el friso coloreado cambia totalmente la percepción que se tiene de la obra", ha explicado a Efe Itziar Martija, responsable del servicio educativo del Museo de Reproducciones Artísticas de Bilbao.

Esta experiencia piloto ha comenzado con la aplicación de la técnica a una única obra de este museo: el friso del Partenón o de las Panateneas, cuyo original decoró el interior del templo de la Acrópolis de Atenas.

Este friso jónico, esculpido hace unos 2.450 años, tenía originalmente una longitud de 160 metros, pero se conserva fragmentado, incompleto y con algunos de sus relieves dañados por el paso de los siglos y la acción del hombre.

Los fragmentos más importantes se exponen en los museos Británico y de la Acrópolis, aunque hay otras partes, más pequeñas, dispersas en distintos museos.

La obra reproducida en el museo de Bilbao corresponde a la porción de la obra conservada en Londres.

Ahora, el público que contemple la copia del friso que se expone en la capital vizcaína puede concebir una idea más aproximada de cómo era la obra primitivamente, incluido su color.

"El friso está muy roto. Los rostros (de algunos personajes) se perdieron, porque los antiguos cristianos los borraron, pero este sistema permite hacerse una idea de cómo eran los rostros o qué llevaban en las manos, y también 'ver' la policromía del friso, en el que sabemos que se utilizaron colores muy brillantes", ha añadido Itziar Martija.

El sistema interactivo, que usa una técnica similar a la del "Kinect" de la consola de Microsoft, se activa cuando el visitante hace pasar una mano cerca de una zona concreta del friso.

Entonces aparece una proyección sobre el fragmento elegido de la propia pieza que muestra una imagen al "completo", en una recreación de como cuando estaba recién hecha.

Es decir, en función de la zona a la que el visitante acerque su mano, la proyección resalta una u otra parte del friso, mientras que el resto de la obra permanece en su estado habitual.

El sistema permite por ahora interactuar con una sola parte del friso, en la que se representa a los dioses Atenea, Hefesto y Poseidón, aunque está prevista una segunda fase que amplíe las posibilidades de la nueva técnica.

El Museo de Reproducciones Artísticas de Bilbao, que reúne copias de obras maestras de la escultura como la Victoria de Samotracia, el Laocoonte, la Venus de Milo y el Moisés de Miguel Ángel, muestra el Friso del Partenón dentro de una exposición dedicada a la Acrópolis que se puede visitar hasta el 7 de abril de 2013.

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