Laura Gallego mezcla su habitual fantasía con humor en "Mago por casualidad"

Concha Carrón.

Madrid, 15 mar.- La consagrada escritora de literatura juvenil Laura Gallego reconoce que lo suyo no es el género infantil, en el que se encuentra "más insegura", por eso para su incursión en el mismo con "Mago por casualidad" ha recurrido a su tradicional fantasía mezclada con un toque de humor.

"Mago por casualidad", ha explicado hoy su creadora, surgió de un cúmulo de "casualidades", al confluir la petición de un amigo de "darle una oportunidad" a este manuscrito que tenía guardado en un cajón desde hacía tiempo, con su compromiso con la editorial Bruño -la única que creyó en ella desde el principio- de hacer un día algún trabajo para ellos.

De ahí que la escritora valenciana, que habitualmente publica con SM, se haya decidido a introducirse en la literatura infantil con la editorial Bruño, así como a donar el importe correspondiente a los derechos de autor de esta nueva novela a la organización Unicef.

El libro, que estará en las librerías a partir del próximo 28 de marzo destinado a un público a partir de diez años y que ha sido ilustrado por José Luis Navarro, narra la historia de "Ratón", un joven que, sin buscarlo, se ve enredado con un hechicero malo que acaba convertido en cuervo mientras que el bueno de "Ratón" hereda, por casualidad, sus poderes.

Con millares de seguidores entre los lectores adolescentes, Laura Gallego no ha querido, en esta nueva obra dirigida a un público más joven, olvidarse del género fantástico que tan buenos resultados le ha dado tras el éxito de las sagas de "Crónica de la Torre" y "Memorias de Idhún". De esta última entrega ha vendido más de 750.000 ejemplares.

Sin embargo, a pesar de retomar la fantasía, "Mago por casualidad" es, según su autora, su libro "más desenfadado y loco", con personajes "disparatados" que, dice, "han hecho reír mucho ya a todo el que se lo ha leído".

No obstante, reconoce que hasta que no observe la reacción del público infantil, para el que esta tarde hay un acto de presentación en el centro cultural Conde Duque de Madrid, no estará tranquila, ya que con los libros de literatura infantil siempre tiene "miedo" de "no hacerlo bien".

Aunque cuando lo escribió pensó que este sería un "título suelto", Gallego reconoce que no descarta darle continuidad, y señala que, por si acaso, ya tiene título y contenido para una segunda parte.

A pesar de que los libros que tiene en mente no van "en la misma línea", admite que, de vez en cuando, le sale "la vena humorística", y se vanagloria de que, a sus 34 años, siempre ha escrito lo que ha querido y ha tenido la suerte de que eso "ha coincidido con lo que le gustaba a los lectores".

A quienes ya estén pensando en acusarla de seguir la estela de los libros de magia tipo "Harry Potter", la escritora les responde que tiene libros de este género, como "Memorias de una aprendiz de bruja", escrito con tan sólo 17 años y no publicado, anterior a la saga del popular mago y a la colección de "Kika Superbruja".

"Cuando empecé a escribir fantasía no estaba de moda, aunque luego vino el boom de la literatura fantástica y me ha venido bien, pero no escribo ese género porque esté de moda", asegura.

Isabel Carril, directora de Publicaciones Generales de Bruño, ha señalado que con el primer libro que Laura Gallego publica con su editorial se conmemora el número 200 de su clásica colección "Altamar", inaugurada hace casi un cuarto de siglo para lectores desde los 6 a los 14 años con el objetivo principal de fomento de la lectura.

Por su parte, Raquel Fernández, directora de comunicación de Unicef España, ha jugado con el título del libro para señalar que para esta organización "la magia por casualidad" es casi su "día a día", ya que "hay muchos hechiceros malos sueltos y muchas guerras y hambrunas de consecuencias terribles para los niños".