El príncipe William y Kate Middleton, duques de Cambridge, están realizando su primer viaje oficial a Pakistán, un país donde se les ha recibido por todo lo alto. Los futuros reyes de Reino Unido llegaron este lunes y ya han completado su primera jornada de actos, donde han hecho hincapié en su caballo de batalla actual, la salud mental.
William y Kate visitaron el College for Girls en Islamabad, la capital del país, donde recorrieron diferentes aulas, conocieron a las alumnas y charlaron un rato con ellas. El objetivo principal de esta visita es defender, precisamente la educación de las niñas en este país. Además, también se desplazaron al Parque Nacional Margalla Hills, donde se está llevando a cabo un programa de seguridad especial, ya que todavía hay zonas del país que permanecen en conflicto.
Los duques se han mostrado felices de poder en una tierra en la Lady Di estuvo hasta tres veces y sigue siendo muy admirada, tal y como algunas estudiantes le dijeron al príncipe William. Se están volcando con cada persona que se les acerca e interesándose por todas las iniciativas que están conociendo. Pero, además, Kate está brillando con luz propia.
La duquesa de Cambridge está dando una lección magistral de cómo se puede adaptar el estilo personal a una cultura diferente, cosa que no hizo, por ejemplo, Melania Trump, en su gira por África el año pasado, y que puede servir de ejemplo a la Reina Letizia para el próximo viaje internacional que tiene a la vista. Los looks de Kate se mimetizan con la cultura islámica sin que vaya 'disfrazada', algo que los medios internacionales han destacado.
A su llegada a Pakistán, Kate lució la vestimenta tradicional del país formada por un kurti -similar a un vestido- acampanado, una camisa larga y unos pantalones, todo en un precioso color aguamarina diseñado por Catherine Walker, una de sus diseñadoras de cabecera. Este look supone todo un homenaje a su suegra, Diana de Gales, quien en una de las ocasiones que estuvo fue vestida de un modo muy similar y en el mismo color.
Para el segundo día, en el que realmente comenzó la visita oficial, Kate se decantó por una kurta -camisola larga- con unos pantalones a juego en color azul lavanda. Además, incorporó el típico pañuelo al que suele llevar este atuendo, en su caso colgado en un hombro, lo que hizo que luciera impecable. El estilismo pertenecía a la diseñadora pakistaní Maheen Khan. Al igual que el día anterior, optó por zapatos color 'nude' que no llamaran la atención por encima de la ropa.
Esta forma de Kate de adaptarse a las circunstancias sirve de muy buen ejemplo para nuestra Reina. Los Reyes de España partirán el domingo 20 de octubre, nada más acabar su periplo en Asturias por los premios que se entregan el viernes 18, a Japón para asistir a entronización de Naruhito, un país que han visitado en varias ocasiones, siendo la última hace dos años.
Aunque en todos esos casos doña Letizia estuvo más que a la altura de las circunstancias, con looks que hacían guiños al país del Sol Naciente, la gira de Kate en Pakistán puede servirle de inspiración para arriesgar un poco más con su ropa de viaje y mimetizarse con la cultura nipona. Sobre todo, porque asistirá a una ceremonia histórica, pues es la primera vez en 200 años que hay un nuevo emperador por una abdicación.
Por ello, es una buena ocasión para que la Reina se ponga algún atuendo tradicional de esta cultura, aunque no esperamos que utilice un kimono. Este mes es muy importante para la soberana, pues tiene apariciones muy importantes. La primera fue el sábado pasado en el desfile militar por el día de la Hispanidad y no pudo dejar mejores sensaciones con su vestido rosa de Felipe Varela, pura fantasía. Por lo que tanto en los Premios Princesa de Asturias como en Japón nos esperan grandes sorpresas.
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