Zaragoza, 3 oct.- Los actores Maribel Verdú y Antonio Molero han aparcado sus respectivos trabajos en dramas y seriales para subirse a una comedia que provoca la continua carcajada gracias a la tormentosa relación que forman los opuestos personajes a los que dan vida en "El tipo de la tumba de al lado".
Una obra basada en el súper ventas de Katarina Maetti adaptada al teatro por Alain Ganas y que estará en escena en el Teatro Principal de Zaragoza desde mañana y hasta el 14 de octubre.
Maribel Verdú da vida a Laura, una joven bibliotecaria a la que le gusta la ópera, el cine y pasarse horas leyendo en el sofá y que acaba de perder a su marido, un biólogo "aburrido en la cama" con quien no disfrutaba, según ha comentado la actriz.
Antonio Molero hace el papel de Pablo, un ser "totalmente apegado a la tierra", un granjero que ha vivido toda la vida con su madre y que ahora se encuentra "solo y desbordado" tras la muerte de su progenitora.
Ambos comparten un banco del cementerio donde se enfrentan a la soledad, ignorándose hasta que "aparece una mirada" que es, ha explicado Molero, la "chispa que prende el fuego de esta relación tormentosa" entre dos personajes de carácter opuesto.
Laura, según Verdú, "se encuentra a un tío que es como pura tierra", que le hace "vibrar" y por el que se vuelve loca pero que debido a la falta de entendimiento entre ambos y "por cosas de la vida" hace que la relación "se vaya al traste".
Con un banco como único mobiliario y un ciclorama que ambienta los distintos colores del cielo, los dos personajes entablan un monólogo con el público al que imprimen un ritmo vertiginoso con un cambio continuo de planos que van desde la relación entre la pareja, a sus pensamientos y sus respectivas vidas.
A pesar de la "aparente ligereza" de la obra, Molero piensa que sirve de argumento para que luego el público reflexiones sobre las relaciones de pareja, de cómo se puede llegar a ser tan contradictorios, sentir atracción por una persona completamente distinta y "una vez conseguida tratar de hacerla igual que uno".
Para Verdú, quien da vida a la malvada de la película muda Blanca Nieves que competirá por los Óscar, se trata de una comedia con "muchas carcajadas" y que para ella, después de actuar en "un drama detrás de otro" y dada la actual situación de crisis, es "un gusto y un disfrute" poder representar.
Una obra con la que Molero se siente "como el apóstol San Pablo" porque "nunca he tenido tanta sensación de hacer una labor social como ahora".
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