Villacañas (Toledo).- El diestro madrileño Miguel Abellán salió a hombros de la plaza de toros de Villacañas, tras cortar las dos únicas orejas de la tarde en la corrida de feria celebrada hoy en esta localidad toledana, en un festejo en el que la fuerza, la casta y la bravura del ganado brillaron por su ausencia.
Se lidiaron seis toros de la ganadería de El Sierro, de Castraz (Salamanca), blandos y descastados, excepción del quinto al que Abellán le sacó el máximo partido -que tampoco era demasiado-, pero al que le hizo la faena justa para que el público, ávido de espectáculo, llegara a pedir el máximo de trofeos para el madrileño, lo que le valió la puerta grande.
Juan José Padilla, petición y palmas, y ovación.
Miguel Abellán, fuerte petición y 2 orejas.
Javier Sánchez Vara, silencio en ambos.
La plaza registró mas de media entrada en una tarde tormentosa.
Encierro bien presentado pero con poco o ningún contenido y que solo permitió el lucimiento en banderillas de Padilla y de Sánchez Vara quien estuvo a punto de cuajar una buena faena en el sexto, al que el varilarguero castigó demasiado y que el guadalajareño había brindado a una peña local con una pancarta que decía "Sí a la tauromaquia, sí a la libertad".
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