La fiesta de los excesos: sorprendentes estilismos en los American Music Awards

La pasada madrugada hubo fiesta en Los Angeles. Algo que es bastante habitual, pero en esta ocasión estuvo repleta de rostros famosos y de música, ya que anoche se entregaron los American Music Awards, en el Teatro Microsoft de la ciudad. Una cita especial porque en esta gala no solo se reunieron las grandes estrellas actuales, sino también otras pertenecientes a otras épocas que llevaban bastante tiempo sin salir a la palestra, como Mariah Carey, que volvió por primera vez en cuatro años a un evento oficial.

Teniendo en cuenta que en este tipo de galas musicales el objetivo es llamar la atención y poner una nota divertida, los estilismos nada tuvieron que ver con los que estamos acostumbrados en otras alfombras rojas de Hollywood. Transparencias, mucho glitter, escotes infinitos y colores flúor, que son tendencia esta temporada. Todos los excesos se dieron cita anoche en Los Angeles dejándonos imágenes como las que mostramos a continuación.

Porque, entre tanta nota llamativa, alguna se encargó de dejar bien claro que, por mucho que pasen los años, la que tuvo, retuvo. Y bastante mejor que incluso en su juventud. Hablamos de Jennifer López, que fue -con mucha diferencia- la mejor vestida de los American Music Awards con un vestido en rosa flúor con un espectacular escote asimétrico y falda vaporosa que dejó a los asistentes con la boca abierta.

Otra que no falló y que ya nos ha acostumbrado a ello es la modelo Heidi Klum, otra mujer que sabe cómo continuar resplandeciente y que por ella no pasen los años. En su caso, optó por un vestido con flecos en color negro también con un pronunciado escote. Un look muy 'boho' que remató con su peinado 'wet' o estilo mojado.

La cantante Rita Ora también puso una nota de elegancia dentro de la extravagancia. Aunque los volúmenes de su vestido negro con brocados de flores eran algo exagerados, se ajustaban perfectamente a sus proporciones y a su estilo. Las mangas farol destacaban gracias a la coleta alta que llevó y un maquillaje en tonos nude que dejaba todo el protagonismo al espectacular traje.

Aunque iba algo arrugada -es lo que pasa cuando se utiliza el satén-, la cantante y actriz Vanessa Hudgens también supo brillar en medio de toda la excentricidad. Con un vestido lencero en color rosa nude y su nueva media melena fue correcta y, dentro de lo que cabe, muy sencilla.

Hasta aquí la elegancia. Los demás estilismos se caracterizaron por el exceso, cada uno en su estilo. Por ejemplo, Dua Lipa fue de las más criticadas por su vestido blanco con pliegues, que no le favorecía nada y no destacaba su gran belleza. Además, las uñas en amarillo no iban con el vestido.

Como decíamos, esta fiesta significó el regreso de Mariah Carey a la vida pública tras cuatro años retirada. Y si por algo se ha conocido a la cantante, además de por su espectacular voz, es por su gusto por las prendas ceñidas y llamativas. En este caso, no fue de las más extravagantes y llevó un vestido negro de corte sirena con transparencias y un imponente escote, uno de los sellos de identidad de su estilo.

Una de las triunfadoras de la noche, la cantante Camila Cabello, también tiró de vestido excéntrico para recoger sus dos galardones, el de la Mejor Artista Nueva y otro por el tema Havana, que ganó el American Music Award a la Mejor Canción de Pop/Rock. La cubana también jugó a los volúmenes con un vestido de palabra de honor en blanco y negro y unos guantes largos en blanco que no lograron dotar de elegancia a su look.

Pero si hubo alguien que llamó la atención, como de costumbre, fue la rapera Cardi B, que fue la única que optó por las flores, en su caso, en todo su esplendor. Un vestido repleto de ellas con corsé y un tocado también de flores formaron otro estilismo 'made in Cardi' que pasará al recuerdo.

Por último, un guiño futurista de la mano de Taylor Swift, que lució un modelo minifaldero completamente metalizado -a modo de bola de discoteca- con botas altas a juego.