Ono-dit-Biot alerta en "Inmersión" del riesgo "suicida" del recorte cultural

Catalina Guerrero.

Madrid, 4 dic.- Recortar en la cultura es "suicida" para el futuro de Europa, advierte a Efe Christophe Ono-dit-Biot, quien con su "doble cerebro" de escritor y periodista se siente un "monje guerrero" al servicio de la riqueza histórica y cultural europea, como el protagonista de su premiada "Inmersión".

Galardonado con el Gran Premio de novela de la Academia Francesa y el Renaudot des Lycéens en 2013, el quinto libro del redactor jefe adjunto del semanario francés Le Point sale ahora en español.

En él Ono-dit-Biot, también conocido en Francia como CODB -las iniciales de su nombre y apellido-, hace una "inmersión" en la pareja, la paternidad, el miedo ante la inestabilidad del mundo contemporáneo, la fragilidad del planeta y la identidad europea, que defiende a capa y espada frente a los nacionalismos y regionalismos.

Con una fuerte carga simbólica y con altas dosis de elementos autobiográficos, "Inmersión" reconstruye la historia de una pareja contemporánea, presa del vértigo de esta época, atenazada por la crisis, el miedo al futuro y en la que cada vez es más difícil amar.

Una época en la que, añade este antiguo profesor de literatura, "se comunica sin cesar, pero se dice menos". En la que lo que es interesante lo marca los algoritmos de Google y en la que no existe periodismo, solo "seguidismo".

La historia trágica de su novela arranca con la imagen del cadáver desnudo de una mujer en una playa de Arabia y en ella se impone la voz de un hombre, César, que reconstruye para Héctor, el hijo de ambos, el trayecto de ese amor truncado entre un periodista francés y una artista española especializada en la fotografía.

César es un periodista normando que fue gran reportero en su juventud, que fue -como CODB- enviado especial a diversos conflictos en Asia u Oriente Medio o que relató "in situ", entre otros desastres, los estragos del tsunami de 2004 en Tailandia, y que ahora, al final de la treintena, divide su tiempo entre la escritura y su labor de crítico cultural, tras jurarse que nunca más saldría de Europa.

Mientras que su gran amor, Paz, una asturiana, al inicio de la veintena, radiante, inquieta e increíblemente talentosa, siente que se ahoga en Europa y pese a su ascenso fulgurante en el mundo del arte y el nacimiento de su hijo, abandona todo por su búsqueda de autenticidad y su pasión por los tiburones y el mundo submarino.

Tras César, un enamorado del valioso legado de Europa, se esconde el Ono-dit-Biot (El Havre, 1975) actual, el padre de un niño de 5 años y de una niña de apenas seis meses fruto de su matrimonio con una asturiana, y tras Paz, las inquietudes del que fue cuando era joven.

"Es una novela de amor, es una novela de nuestra época, en la que quería transmitir (a mi hijo) cosas que son importantes para mí: la emoción artística, el sentimiento amoroso, que cuide su cuerpo, que se sumerja en su época, pero que no olvide el mundo antiguo".

Entre las más de 400 páginas, editadas por Berenice, CODB también "desliza" a su hijo Héctor, que calcula que podrá leer este libro dentro de 10 años, cuando tenga 15, algunas pinceladas de la historia de amor de la que nació y una serie de referencias a la Antigüedad y al arte que son fundamentales para él.

Se trata, señala, de una especie de "caja fuerte de referencias del pasado", un "monumento" a las "bellezas de los museos, a las bellezas humanas, a sus paisajes, a las playas europeas".

Es el medio, continúa, de decirle que "los placeres de los que uno ha gozado son todo cuanto queda al final de una vida".

"Es un libro duro, pero también sereno porque pienso -dice- que hay que aportar en el mundo de hoy una cierta serenidad y lucidez para apreciar lo que tenemos y no ser pesimistas ni derrotistas".

Un libro, en definitiva, que Ono-dit-Biot, habitual en programas de televisión y conductor de dos emisiones culturales de radio, quería inscribir en "un mundo que está en vías de transformación" y en el que Europa, está convencido, tiene un papel importante que jugar.