París: del terciopelo al cuero para el otoño-invierno 2012-2013

  • Hombres vestidos de terciopelo, oro y cachemira por la firma John Lawrence Sullivan, y amantes de casacas y chalecos de cuero negro y prendas con grandes cuellos con el marroquí Yohan Serfaty, abrieron hoy en París las colecciones de moda masculina para el próximo invierno.

Lola Loscos

París, 18 ene.- Hombres vestidos de terciopelo, oro y cachemira por la firma John Lawrence Sullivan, y amantes de casacas y chalecos de cuero negro y prendas con grandes cuellos con el marroquí Yohan Serfaty, abrieron hoy en París las colecciones de moda masculina para el próximo invierno.

El ex campeón nacional de boxeó japonés Arashi Yanagawa, reconvertido en diseñador de moda para defender la firma JL Sullivan, lanzó para el otoño-invierno 2012-2013 una explosión de color sobre terciopelo, satén, lana, cachemira y cuero, generalmente mezclados entre sí en un mismo conjunto.

Nacido en Hiroshima, en 1975, Yanagawa no sólo reunió las materias más dispares, sino que también mezcló colores y formas, de modo que sus pantalones pitillo de cuero teñido de oro viejo o de resplandecientes dorados se llevarán el próximo invierno bajo elegantes abrigos largos de cachemira marrón claro o azul.

Sobre la pasarela de la Maison des Metallos, histórica casa de los obreros metalúrgicos de París, triunfaron cazadoras de cuero doradas sobre pantalones extra anchos, abundantes prendas de cuello alto y americanas de cuadros negros y blancos combinadas con camisas de cuadros similares.

Yanagawa, además, ideó el porte de americana sobre americana, de parkas, chalecos acolchados sobre camisa y pantalón rayados a juego y los trajes monocolores de diferentes verdes esmeralda.

La chaquetilla corta y el superconfortable jersey grueso de punto, los cuadros de sus prendas acolchadas, el corte de sus trajes y las rayas y cuadros de algunos de sus conjuntos dieron el toque británico a esta marca que tomó su nombre de un campeón de boxeo estadounidense del siglo XIX.

Muy muy lejos del tiempo y el espacio donde fue a buscar emociones indumentarias el diseñador de origen marroquí Yohan Serfaty.

Góticos, con toques de marcada inspiración medieval en ocasiones, sus modelos buscaban la "atemporalidad", según dijo a Efe este diseñador amante de las creaciones "perennes".

Su desfile fue en realidad una "performance", pues junto a sus modelos negros, grises, verdes y marrones, asimétricos, con abundantes superposiciones, dobles solapas y protectores cuellos altos, la Compañía Du Bon Goût proyectó un vídeo de las tres cabinas transparentes donde se cambiaban los modelos tras un juego de sombras.

Un leve toque plateado en el forro de una prenda y otra teñida de blanco sobre pantalón y especie de túnica-falda, ofrecieron el contraste de esta colección, llevada siempre sobre botines sobre los tobillos y a menudo gorros de punto.

Tanto la marca Y Project by Yohan Serfaty como John Laerence Sullivan presentaron sus diseños ante un público de entendidos y numerosos seguidores de sus respectivas obras.

Sin embargo, Christian Lacroix Men optó por involucrarse con las redes sociales y sorteó a través de ellas diez entradas a su desfile, en el que Sacha Walckhoff vistió al hombre del invierno 2013 de negro, blanco y gris, con algunos toques de rojo.

Ami Alexandre Mattiussi (1980), ex colaborador de Christian Dior, Givenchy y Marc Jacobs, amante de un estilo chic pero fácil de llevar, sobre materias naturales, fue hoy otro de los grandes protagonistas del día, junto con su colega Nicola Formichetti para Thierry Mugler.

El amigo de Lady Gaga, volvió a dar en el toque futurista, no siempre muy fácil de vestir, con capas y efectos capas, modelos grises con piezas y mangas negras o azules acharoladas, conjuntos enteramente plateados, o modelos rojizos de chaqueta y pantalones muy ajustados por detrás, con aparatoso efecto falda/túnica en el delantero.

Característica histórica de la casa, en algunos momentos, la cremallera tuvo un papel principal.

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