La Reina de Inglaterra se rinde: no usará pelo de animales en su nuevo vestuario

  • La soberana, que es amante de los abrigos y estolas de piel, no adquirirá nuevas prendas que sean auténticas.
Isabel II
Isabel II
EP

Isabel II se suma a la sostenibilidad en su vestuario. Pero a su manera. La soberana británica ha tomado una radical decisión que supone un antes y un después en su forma de vestir y en sus costumbres. El equipo de la Reina ha anunciado que no volverá a adquirir prendas que estén hechas de piel de animal auténtica. Serán sustituidas por piel sintética.

Este anuncio ha sido muy aplaudido, ya que el futuro de la moda pasa por dejar de usar este tipo de materiales en pos del respeto al medio ambiente y al mundo animal, en este caso. Si bien debemos matizar que no se desprenderá de las que ya tiene y son auténticas, pues Isabel II es una gran amante de los abrigos y estolas de piel. Además de practicar la caza desde muy joven.

Por ello, seguirá vistiendo todas las que ya tiene compuestas de pieles naturales, tal y como informó Buckingham Palace el miércoles. Las asociaciones animalistas de Reino Unido han celebrado la decisión, pues contribuirá a lanzar un mensaje al resto del mundo acerca de que las pieles "no son moda".

Míticos son los impresionantes abrigos de piel que la soberana se ha puesto en todos estos años en el trono -más de 60-, compuestos por pieles de zorro o armiño, que forman parte de la historia de la corona británica. Todos ellos seguirán siendo usados, pero no habrá ninguno más nuevo.

Aunque las asociaciones ecologistas y en defensa de los animales, como PETA -que ha criticado duramente a la monarca estos años- lo celebran, las organizaciones de signo contrario recuerdan que va a seguir usando pieles. La Asociación Española de Peleteria ha enviado un comunicado este jueves aclarando ese punto.

Además, ha defendido que "el pelo natural es uno de los productos más sostenibles y duraderos, en particular en comparación con los materiales sintéticos que están hechos de plástico". Sea como sea, las pieles tienen los días contados en el sector de la moda. La mayoría de firmas ha renunciado a usarlas, aunque otras se resisten. 

Porque la tradición peletera sigue estando muy arraigada en el sector del lujo, para la que es un signo de distinción y estatus. El problema es que los recursos naturales cada vez son más exiguos y hay un alarmante coste climático por culpa de esta industria. Por ello, cada vez más firmas dan marcha atrás en sus planes de emplear pieles.

Buckingham, sabedor de que este movimiento es imparable, ha tomado esta decisión convirtiendo a Isabel II en la primera reina del mundo en dejar de usar pieles. Un golpe de efecto sin duda en su imagen pública en un momento en que la conservación del clima es un asunto de máxima urgencia.

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