Para celebrar el 40º aniversaio de la película, Richard O'Brien, su creador, eligió el escenario del Playhouse Theatre de Londres y se reservó, para él y otras celebridades que se irán alternando, el papel de narrador.
Un regreso que ha despertado entusiasmo entre los fans de este espectáculo delirante, que agotaron en tres días las entradas de las once noches.
Por ello, este miércoles, los productores anunciaron otras ocho representaciones, cuyos boletos empezarán a venderse el viernes por la mañana.
El 17 de septiembre está prevista una noche de gala en colaboración con Amnistía Internacional que será transmitida en vivo en los cines del Reino Unido y de Europa y servirá para ayudar a Ihar Tsikhanyuk, el transformista bielorruso golpeado por la policía por hacer campaña por los derechos de los homosexuales.
"The Rocky Horror Show es una celebración fabulosa de la libertad de expresión, un punto fundamental de la labor de Amnistía", dijo Aikta Hancock, directiva de esta organización.
A pesar de sufrir un fracaso comercial cuando se estrenó, el film, un homenaje paródico a las películas de ciencia ficción, de terror y de serie B, se ganó una legión de incondicionales y todavía se proyecta regularmente en Estados Unidos, Francia o el Reino Unido, en sesiones que se convierten en una fiesta.
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