Sitges tendrá en cuenta la frontera entre creación y libertad de expresión

  • El Festival de Cine Fantástico de Sitges ha agradecido hoy el apoyo institucional a su director, Ángel Sala, cuya causa por la película "A Serbian Film" ha sido archivada, y ha anunciado que tendrá en cuenta el debate surgido en este caso sobre la frontera entre creación y libertad de expresión.

Barcelona, 23 feb.- El Festival de Cine Fantástico de Sitges ha agradecido hoy el apoyo institucional a su director, Ángel Sala, cuya causa por la película "A Serbian Film" ha sido archivada, y ha anunciado que tendrá en cuenta el debate surgido en este caso sobre la frontera entre creación y libertad de expresión.

En un comunicado hecho público hoy, el equipo de dirección "se compromete a administrar de forma responsable el debate abierto por el proceso en torno a los límites del audiovisual y la libertad de expresión".

Añade que ha entendido el suceso como una experiencia que les permitirá afrontar, con más éxito aún, futuras ediciones del Festival.

La dirección del certamen agradece el apoyo recibido durante los últimos meses desde todos los sectores de la sociedad, desde las instituciones implicadas en el Festival (Generalitat, Ayuntamiento de Sitges y Ministerio de Cultura), así como de todos los patronos, patrocinadores y colaboradores que hacen posible el Festival.

El juzgado de Vilanova i la Geltrú (Barcelona) archivó ayer la causa abierta por un presunto delito de pornografía infantil contra el director del Festival de Cine Fantástico de Sitges, por la exhibición de la película "A serbian film", que incluía crudas imágenes de sexo y violencia con menores.

En el auto de archivo, la titular del Juzgado número 8 de Vilanova, Marga Fe Subirats, consideraba que el citado filme "no es una película pornográfica, por cuanto las imágenes, antes de poseer una finalidad de provocación sexual, tienden a todo lo contrario", y especifica que "se trata más de una película de género 'gore'".

La resolución añadía que las escenas de la película, "como bien indica el propio letrado del imputado, pueden calificarse de execrables, masoquistas y de una violencia extrema, pero en modo alguno persiguen o tienden a la excitación sexual, (por lo menos para personas sexualmente cabales)".

También tiene en cuenta la juez que el imputado no tenía voluntad de cometer un delito y que la película "ha sido objeto de varios premios (de dudoso merecimiento en opinión de esta instructora)".

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