Gas lleva al Grec los "personajes marginados" de "Un tranvía llamado deseo"

  • Mario Gas presenta en el Grec a partir de mañana su versión teatral de la obra de Tennessee Williams "Un tranvía llamado deseo", un espectáculo sobre "personajes marginados" y "totalmente vigente", ha dicho el director teatral.

Barcelona, 7 jul.- Mario Gas presenta en el Grec a partir de mañana su versión teatral de la obra de Tennessee Williams "Un tranvía llamado deseo", un espectáculo sobre "personajes marginados" y "totalmente vigente", ha dicho el director teatral.

Del 8 al 31 de julio el Teatro Tívoli será el escenario de la historia que interpretaron en el cine Vivien Leight y Marlon Brando, personajes recreados aquí por Vicky Peña y Roberto Álamo.

Historia de diferencias sociales, de la necesidad de ser amado y de la marginación habla, en opinión de Gas, de "personajes marginados a los que la sociedad amputa su deseo de libertad".

Williams enfrentó en el texto dos culturas, la de la América sureña y aristocrática y la de la nueva clase emergente, representada por el polaco Stanley Kovanski, interpretado aquí por Roberto Álamo.

A juicio de Gas, la obra, que el autor escribió "con la piel quemada" por los conflictos sociales, "es totalmente vigente".

Tras "El zoo de cristal" y "La gata sobre el tejado de zinc", ésta es la tercera obra de Tennessee Williams que adapta Mario Gas, que ha asegurado que el autor estadounidense vuelve a "emerger con fuerza inusitada en todas partes, tras un período de ostracismo".

Este año se cumple el centenario del nacimiento del dramaturgo (Columbus, Mississippi) quien estrenó en 1947 en el barrio teatral neoyorquino de Broadway "Un tranvía llamado deseo". Cuatro años después, Elia Kazan llevó al cine esa obra.

El espectáculo representa la vuelta al teatro después de 13 años de Ariadna Gil (Stella Kowalski), en un reparto completado por Álex Casanovas, en el papel de Mitch, Anabel Moreno en el de Eunice Hubbel y hasta un total de once actores.

"En el cine ruedas y ya está y con el teatro te das cuenta de que el personaje no tiene fin", ha dicho Gil con respecto a su actuación.

"Es un texto más difícil de lo que parece", ha considerado Gas y la versión que se presenta en el Grec, tras haberse estrenado en el Palacio de Festivales de Santander y haber hecho temporada en el Teatro Español, "supone un salto en el código interpretativo, más allá del icono universal de la camiseta rasgada de Marlon Brando".

La idea del montaje partió del productor Juanjo Seoane, quien tenía claro que el papel principal de Blanche du Bois debía interpretarlo Vicky Peña y la actriz, a su vez, de que la dirección del espectáculo tenía que llevarla Mario Gas.

Peña ha explicado que interpreta el papel desde su "verdad de mujer" y que, aunque ha visto el filme protagonizado por Vivien Leight varias veces, no ha querido volver a verlo para "encontrar su propia verdad", su manera de afrontarlo.

El suyo es un personaje que, según ha dicho Peña, causa compasión, admiración y rechazo.

La escenografía del espectáculo, a cargo de los creadores habituales de Gas, ha seguido "un tratamiento esencialista que conecta con la vena poética del autor", ha añadido el director teatral. Luces, sonido y vestuario "no son aditivos de la obra", ha observado Gas, sino que "la explican y añaden lo que queda fuera de plano".

Gas, que es director artístico del Teatro Español de Madrid, ha opinado asimismo sobre los recortes de Cultura: "Me parece fatal, fatal, fatal. Deberían quitar presupuesto de otras cosas, ejércitos, carreteras inservibles, remodelación de despachos..."

Ha añadido que el Teatro Español "en siete años ha abierto tres salas y creo que el Ayuntamiento de Madrid es consciente de que no puede bajar el nivel". EFE.

Mostrar comentarios