Pedroche ya tiene el vestido en casa y confiesa que es una hormiga ahorrando

  • La presentadora de las campanadas de Antena 3 asegura que es una apasionada de los números y que vive con sabor agridulce la llegada del 31.
Cristina PEdroche
Cristina PEdroche

Cristina Pedroche ya tiene en su casa uno de los secretos mejor guardados de estas fechas: el vestido que llevará en las campanadas de Antena 3. Entrevistamos a la reina de la Nochevieja un día antes de que llegue 2018 y nos confiesa que es una persona muy ahorradora y que un año más nos dejará con la boca abierta con su vestido.

La colaboradora de 'Zapeando' estudió la carrera de Dirección de Empresas y nos habla de una parte de su vida menos conocida: “Soy una apasionada de los números”. De sí misma dice que es una “hormiguita ahorradora” desde que empezó a trabajar a los 16 años. “Lo he aprendido de mi madre que es, probablemente, la persona más trabajadora que he conocido… hasta que llegó David (su marido)”, ríe. Pedroche asegura que está pendiente de todo lo relacionado con la contabilidad de su hogar y ella misma es la que controla todas sus nóminas, facturas, declaraciones de la renta, la declaración del IVA trimestral…

Pedroche es sinónimo de éxito en televisión. Cada año son más los que acuden a Antena 3 para ver unas campanadas que el año pasado sentaron frente al televisor a 2,3 millones de espectadores, dato que hace cinco años la cadena ni podía soñar ¿El motivo del éxito? Una de las condiciones que puso Pedroche. La primera vez que le propusieron dar las campanadas no dijo sí rápidamente sino que pidió dos cosas a cambio. Una, poder ir al programa justo después de participar en la popular carrera de la San Silvestre. La segunda, “vestirme como quisiera”.

Nunca antes una decisión así fue tan acertada. “No me veo con esos vestidos encorsetados y muy largos. Soy una chica joven y muy divertida a la que le gusta expresar con la forma con la que me visto lo que siento y lo que me apetece”. Y ese saber lo que quiere le ha valido a Antena 3 ser una de las cadenas favoritas para seguir las uvas. Y por lo que dicen, este año no solo dará ella la campanada, sino que también su compañero de ceremonia, Alberto Chicote, promete sorprender. 

Solo seis personas han visto ya el traje

Sobre el modelito, que llegó el viernes a las ocho y media de la mañana a su casa, poco adelanta. Sólo ha dicho que será más cómodo, que tendrá colorines, brilli brilli… Ahora mismo solo otras seis personas lo conocen: su marido, sus padres, su peluquero, su maquilladora y Josie, su estilista. El vestido duerme ya en el armario de su casa, donde también guarda con mucho cariño los tres de años anteriores que, por ahora, sólo ha vuelto a utilizar para la foto que se hace su marido con ellos. Ya se ha convertido en tradición que el chef de Diverxo, David Muñoz, pose con el modelito del año anterior en redes sociales por estas fechas.

A Cristina estas horas previas a las campanadas le saben un poco agridulces. “Ya llega el día y se desvelará todo por fin. Nadie se espera lo que es pero, por otro lado, es superagrio porque me siento sola. Estos días son alegres y tristes a la vez porque por un lado todo lo que rodea a la creación del vestido es increíble y como nadie se lo espera es fascinante, pero al mismo tiempo, es agrio porque me siento sola con ese secreto y cuando llega el momento estoy al borde del abismo, nerviosa”. Pero Cristina lo tiene claro, al abismo se tira de cabeza como ha hecho otros años, aún sabiendo que llegarán tanto los aplausos como las críticas.

La fiel seguidora del Rayo Vallecano reconoce que sabe que todo ello le hace sentirse "más libre”. Para ella la última noche del año es tan mágica que “hay que ser Beyoncé, Lady Gaga y Rihanna a la vez”. Y por lo que la escuchamos decir del vestido de este año será simplemente espectacular. “Quiero que la gente sueñe con el vestido”.

Mas allá de los focos y las estrellas, Pedroche es de las que más de una noche se ha sentado frente al televisor para cenar un sándwich. “Los de pavo con extra de queso me encantan…”, dice. También recuerda el día que hizo casi un sacrilegio al tomar otro de jamón serrano con pan de molde "porque no tenía del pan normal". La presentadora, que tiene contrato con Atresmedia y en el que se incluye dar las Campanadas, no soñaba de pequeña con estar delante del reloj de la Puerta del Sol para dar la bienvenida al nuevo año, pero tras cuatro con éste, lo considera ya todo un sueño cumplido.

Cristina Pedroche
 

Muy marinera

Cristina lució el año pasado un espectacular diseño de Hervé Moreau, director creativo de Pronovias, para el que el equipo dedicó más de 150 horas de trabajo. El diseño estaba inspirado en la última colección de Pronovias “Le Ciel” y rememoraba una noche estrellada.

La presentadora sorprendió con un vestido del que destacaba el cuerpo corsé, con escote corazón en terciopelo azul noche y acabado con un delicado 'placement' de estrellas de plata realizadas a mano. La falda se confeccionó en tul del mismo color con degradé de cristal de bohemia.

Para completar el look, al vestido lo acompañó con una chaqueta bolero de tul cristal con 20 estrellas bordadas con brillantes de cristal y 25 tiras realizadas también en cristal de bohemia. El diseño lo completaba una imponente capa bicolor fucsia y verde lima de gran volumen, realizada en mikado de seda.

PEdroche
  

Las transparencias de 2015

La presentadora de Antena3 apareció junto a Carlos Sobera hace ahora dos años con un vestido de Pronovias confeccionado con 20.300 cristales. El vestido de corte sirena, bordado enteramente a mano, fue confeccionado en tul cristal y organza metalizada con más de 20.300 cristales tallados. Para completar el look, Cristina Pedroche llevaba una capa de raso en color champán y cuello de piel.

Pedroche
 

2014, el año de la campanada

El año 2014 fue el del debut de Cristina Pedroche como presentadora de las campanadas. Es un año que no olvida por varios motivos. Uno de ellos es porque perdió a su abuela. Pero ese mismo 2014 también hizo un saque de honor con el Rayo Vallecano y conoció al que ahora es su marido, David. El vestido que lució en aquellas campanadas fue de la firma Charo Ruiz. Desde ese momento se convirtió en la reina de Nochevieja. 

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