Una muestra en Madrid expone la fascinación española por Japón en el s.XVII

  • La exposición "Lacas Namban. Huellas de Japón en España", que será inaugurada el miércoles en Madrid por el Príncipe Heredero de Japón, Naruhito, muestra el deslumbramiento del reino español por la cultura japonesa en la etapa conocida como periodo Namban (1543-1639).

Madrid, 10 jun.- La exposición "Lacas Namban. Huellas de Japón en España", que será inaugurada el miércoles en Madrid por el Príncipe Heredero de Japón, Naruhito, muestra el deslumbramiento del reino español por la cultura japonesa en la etapa conocida como periodo Namban (1543-1639).

Organizada en el Museo de Artes Decorativas en colaboración con la Fundación Japón, en el recorrido de la exposición se podrá contemplar por primera vez un considerable número de obras de laca Namban celosamente guardadas en España.

Con "Lacas Namban" se conmemora el cuarto centenario de la Embajada Keichô, reviviendo uno de los acontecimientos más singulares del reinado de Felipe III, el viaje del samurai Hasekura Tsunenaga a España (1613-1620).

Tras el descubrimiento de las rutas hacia Asia Oriental por portugueses y españoles, grandes barcos comenzaron a atracar en los puertos de Japón a mediados del siglo XVI. Durante el periodo llamado Namban (1543-1639) viajaron en ambos sentidos hombres, mercancías e ideas, promoviéndose un intenso diálogo cultural.

Europa abría así sus ojos hacia otros territorios y se empezaba a vivir la primera globalización. Dentro de este contexto, se desarrolló la delegación japonesa llamada Embajada Keichô (1613-1620), encabezada por el samurai Hasekura Tsunenaga, que viajó a España y la Santa Sede en Roma.

Entre las mercancías más apreciadas y admiradas en Europa, la laca japonesa urushi fue el género de mayor atracción. Su intenso brillo y atractiva textura así como sus motivos decorativos dorados (makie) causaron fascinación entre los primeros europeos que llegaron a Japón.

Los artífices japoneses detectaron pronto la posibilidad de negocio y, en las últimas décadas del siglo XVI, se perfiló ya un género específico destinado a la exportación, la laca Namban, claramente diferenciada de la laca destinada al mercado japonés.

Piezas de uso civil como arcas, arquetas y bargueños elaborados con laca Namban, experimentaron una transformación a su llegada a España. La singular belleza de la laca japonesa hizo que estos objetos se cristianizaran, destinándose, como contenedores de excepción para las reliquias, Sagradas Formas y utensilios sagrados.

El recorrido de la exposición se inicia con una explicación sobre la finalidad de la Embajada Keichô (1613-1620), su trasfondo histórico y la relación diplomática entre ambos países mediante documentos y objetos asociados, acompañados de paneles y proyecciones audiovisuales.

La segunda parte se dedica a las obras de laca japonesa de estilo Namban conservadas en España, una mercancía de lujo que viajaba de Japón a España en los siglos XVI y XVII. Estas piezas son fruto del encuentro entre la Península Ibérica y Japón en el ámbito de una de las artes tradicionales niponas.

La exposición cuenta también con obras de arte producidas durante los siglos XVII y XVIII en tierras mexicanas bajo influencias japonesas, como biombos, enconchados o maques. De esta manera se recordará la importancia de la ruta entre España y Japón a través de Nueva España (México).

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