Una vuelta al circuito más peligroso de Argentina

  • Curvas peraltadas, barreras de neumáticos desatadas a escasos metros de la pista y una seguridad descuidada. Así es el circuito en el que perdió la vida Guido Falaschi el pasado domingo.
Una vuelta al circuito más peligroso de Argentina
Una vuelta al circuito más peligroso de Argentina
actc.org.ar
José Martínez

Última vuelta, Falaschi se juega la carrera con otro piloto cuando llegan a la altura de un doblado. Desesperado, éste se sale de la pista, colisiona contra el muro lateral y levanta una enorme polvareda que precede a una montonera inevitable y trágica. La muerte, que no se aparta de los circuitos, apareció de nuevo, esta vez en el circuito Juan Manuel Fangio, pero se pudo haber evitado.

De nada sirvió que el domingo el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, inaugurase el nuevo asfalto del trazado antes de la serie final del Turismo Carretera, una competición de coches americanos muy popular en Argentina. Guido Falaschi chocó con el piloto doblado y, dando giros, chocó con un muro de neumáticos desatados que, en lugar de absorber el impacto, devolvió el coche a la pista y otro monoplaza lo embistió. Justo lo contrario de lo que le pasó a Sebastian Vettel en Abu Dhabi. A tenor de las imágenes de la televisión, ningún comisario señalizó el accidente.

El piloto fallecido no corría en un circuito con amplias escapatorias. Al contrario, el autódromo de Balcarce se emplaza en una pequeña sierra sobre la que se divisa la ciudad natal de Juan Manuel Fangio. Carece de asientos –sus gradas son las laderas de la montaña- y varias curvas recuerdan a la pelouse del madrileño circuito del Jarama. Además, por unos pocos euros se pueden dar cuantas vueltas se quieran.

Una larga cuesta por un camino de tierra lleva al trazado. Se gira hacia la izquierda para entrar en la pista, a la altura del triste accidente del pasado domingo. Después, serán la pericia y la velocidad las que dictaminen si la visita solo será un paseo o se convertirá en una lucha por alcanzar los límites desde la primera curva, a derechas y peraltada en cuesta arriba. El preludio de la recta de meta.

Siempre en ligera subida, tras varios giros suaves a fondo se llega a una chicane y a la entrada a los boxes. Esa curva a izquierda y derecha se construyó en 1999 para disminuir el paso de los coches por meta. La razón es sencilla. Pronto se comienza a descender y la primera curva, un giro doble a derechas de 180 grados, es peligrosa. De hecho, en ella se produjo un esclofriante accidente el viernes. Agustín Canapino se quedó sin frenos y salió volando hacia las protecciones. Milagrosamente no hubo consecuencias.

Una nueva recta conduce a una horquilla a derechas. El asfalto se torna llano por poco tiempo, ya que hay que seguir bajando para atravesar un túnel y acabar la primera vuelta al trágico circuito. Los pilotos eran conscientes de los peligros del autódromo de Balcarce. Aún así, optaron por correr. Tras la muerte de Falaschi, unos optan por denunciar las medidas de seguridad, otros abogan por la sensatez. "No quiero perder ningún amigo más", lamentó Christian Kohler.

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