Así lo ha destacado el consejero de Sanidad y Políticas Sociales de la Junta de Extremadura, José María Vergeles, en una rueda de prensa ofrecida este miércoles en el Hospital Infanta Cristina, y en la que ha informado de la actividad asistencial del Área Sanitaria de Badajoz durante 2016.
En su intervención, Vergeles ha concretado que a fecha de este miércoles se han realizado un total de 205 trasplantes de hígado, 204 de ellos correspondientes hasta el cierre del ejercicio 2016 y uno en este mes de enero.
Sobre la Unidad de trasplante hepático, el consejero ha recordado que se acreditó en 2007 y que en los primeros años se realizaban una media de 10 trasplantes al año, pero a partir de 2011 se produjo un incremento de su actividad al pasar a hacer una media de 20 trasplantes anuales, así como que en 2016 se ha producido "otro hito importante" como la realización "con éxito" del primer trasplante hepático procedente de un donante fallecido en asistolia o "a corazón parado".
Acompañado del director gerente del SES, Ceciliano Franco, y el gerente del Área de Salud de Badajoz, Dámaso Villa, entre otros, José María Vergeles ha puntualizado que el total de trasplantes hepático en 2016 ha sido de 29 con una tasa en Extremadura por millón de habitantes de 26,8 trasplantes por millón de ciudadanos que sitúa a la región por encima de la media nacional de 24,9 trasplantes.
LISTA DE ESPERA
En materia de trasplantes, el jefe de servicio de la Unidad de cirugía hepatobiliar, Gerardo Blanco, ha considerado que el hecho de que Extremadura esté por encima de la media nacional en trasplantes por millón de habitantes "fluctúa" según el año y supone en todo caso "haber acabado con un déficit que tenían los pacientes extremeños de clara inequidad con respecto al resto de España".
De esta manera, ha puesto en valor que se ha conseguido disminuir la mortalidad de los pacientes en lista de espera para un órgano y que la "oportunidad" de un paciente extremeño de ser trasplantado "ahora es la misma que de cualquier otro paciente del territorio nacional".
Cuando no se hacían trasplantes en Extremadura, ha indicado Gerardo Blanco, había que trasladarse a otros centros en Madrid, Barcelona o Andalucía y la lista de espera del paciente para ser trasplantado era la "más alta" en Extremadura al ser de un año, mientras que actualmente se espera de media en la región 90 días, "que está un poquito por debajo de la media nacional".
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