La Fiscalía belga está investigando un ciberataque fallido sobre la página web y el sistema informático del aeropuerto de Bruselas durante la noche del 22 al 23 de marzo de 2016, el día de los atentados en la capital del país, aunque ha enfatizado que no hubo motivación terrorista en este acto.
En un comunicado, la Fiscalía ha explicado que el ciberataque fue llevado a cabo por un menor estadounidense de Pittsburgh, que confesó los hechos interrogado por el FBI. La oficina federal había registrado su domicilio a petición de asistencia legal por parte de las autoridades belgas.
En cualquier caso, la Fiscalía belga ha señalado que la investigación y los primeros análisis de los equipos incautados descartan una motivación terrorista en el ciberataque y una relación del mismo con los atentados del 22 de marzo.
"La Fiscalía Federal belga, por tanto, quiere enfatizar que esta investigación no tienen ninguna relación con la investigación de los ataques terroristas del 22 de marzo de 2016 en Bruselas y Zaventem", añade el Ministerio Público.
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