El señor de la guerra afgano Gulbuddin Hekmatyar llamó a la paz este jueves en una aparición por video con motivo de la ratificación de un acuerdo entre el gobierno y este jefe insurgente, llamado el "Carnicero de Kabul".
Este acuerdo garantiza la inmunidad al dirigente del movimiento armado Hezb-i-Islami, de 67 años, muy inactivo en los últimos tiempos, y abre la vía a su posible retorno a la política pese a su pasado de notorio criminal de guerra.
"Apelo a todos los elementos antigubernamentales a participar en el diálogo interafgano y a proseguir vuestros objetivos de forma pacífica" declaró Hekmatyar, que vive escondido desde hace años.
El gobierno aprovechó el mensaje par renovar su oferta de negociaciones con los talibanes, ahora en punto muerto, en momentos en que la insurrección está extendida a casi todo el país.
"Es el momento para los talibanes de decidir su quieren continuar la guerra o sumarse a nosotros en favor de la paz" dijo el presidente Ashraf Ghani tras haber ratificado el documento.
Este acuerdo con Hekmatyar es criticado debido, en particular, a los bombardeos que ordenó contra la capital Kabul cuando era primer ministro a principios de los años 1990, sembrando la muerte y la destrucción.
Pero para los observadores sellar la paz con la segunda principal red de insurgentes en el país es un progreso para este gobierno apoyado por Occidente, que intenta negociar la paz con los insurgentes desde hace 15 años.
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