Cruz Roja Española tiene en marcha el servicio de Acogida de Personas Refugiadas desde marzo de 2016. Actualmente, mantiene 46 plazas, atendiendo actualmente a 124 personas en la Región de Murcia. A partir de mayo de 2017, la organización humanitaria ha ampliado y reforzado su servicio de Plan de Empleo para poder acoger a las personas solicitantes y beneficiarias de protección internacional.
Ambos programas están financiados por la Dirección General de Migraciones. En la Región de Murcia, Cruz Roja trabaja con personas de 21 nacionalidades, entre las que se encuentran 12 personas de origen sirio procedentes de Líbano, y un total de 24 menores, según informaron fuentes de la institución humanitaria en un comunicado.
Cruz Roja Española está intensificando su intervención con personas refugiadas dentro y fuera de España. Dentro del país, el objetivo principal de la intervención es la acogida e integración de las personas solicitantes de asilo en la sociedad.
Cruz Roja cuenta actualmente con 1.756 plazas de acogida en 40 provincias, lo que supone que ha triplicado su capacidad en los últimos meses, siendo el porcentaje de ocupación de más de un 90 por ciento. Se espera poder ampliar esta red hasta las 2.500 plazas este año. Las nacionalidades más comunes de las personas atendidas por Cruz Roja en el último año son venezolanas, ucranianas y sirias. Un 27% de los atendidos son menores de edad.
En relación al programa de reubicación y reasentamiento de personas solicitantes de asilo y refugio desde Grecia, Italia, Líbano y Turquía, Cruz Roja Española ha atendido a 684 personas, que han sido acogidas en diferentes localidades españolas.
En total, durante 2016 y los primeros meses de 2017, se ha atendido a través de los diferentes programas de inmigración y asilo a más de 20.000 personas solicitantes de Asilo y Refugiados (16.000 en 2016 y 5.400 este año) en todo el territorio nacional.
Cruz Roja trabaja en este ámbito en coordinación con el Ministerio de Empleo y Seguridad Social para organizar nuevas llegadas previstas en los próximos meses procedentes de Turquía, Italia y Grecia.
CAMPOS DE REFUGIADOS DE GRECIA
Fuera de las fronteras españolas, Cruz Roja Española continúa trabajando en Grecia en los campos de Skaramagas y Ritsona, prestando cuidados de atención primaria, primeros auxilios y apoyo psicosocial.
En ambos campos continúa trabajando en la limpieza de infraestructuras de agua y saneamiento, desinfección de zonas comunes, reparación de drenajes o distribución de artículos de higiene, entre otras labores. Desde que se iniciara la operación, en Grecia se han realizado 200 misiones con diferentes rotaciones de personal.
Durante 2017, Cruz Roja Española va a continuar dando soporte a estos campos, así como en el área urbana de Atenas, donde muchos refugiados carecen de servicios básicos.
Cruz Roja destaca que la Integración Laboral es esencial para lograr la inclusión social de las personas refugiadas y, en este sentido, el programa de itinerarios de inserción para la mejora de la empleabilidad justifica su actuación y necesidad en la dimensión laboral.
El objetivo, añade, es "lograr la inclusión social de las personas solicitantes y beneficiarias de protección internacional en la sociedad de acogida, porque, aunque el mercado de trabajo no es el único espacio generador de desigualdades, sí está constituyendo en la actualidad un factor determinante de la situación de exclusión social".
Entre muchas de las acciones que hay que abordar para que la inclusión de este sector de la población, Cruz Roja explica que la integración laboral "es sin duda la más relevante".
A través de este programa, financiado por la Dirección General de Migraciones, los equipos de Cruz Roja van a trabajar con 150 personas hasta diciembre del 2018, buscando el ajuste entre las capacidades, intereses, y competencias de cada persona, los puestos de trabajo a los que aspira y los sectores emergentes de generación de empleo.
El objetivo final de Cruz Roja es la mejora de empleabilidad de las personas con las que intervienen sus profesionales y, con ello, facilitarles una mejor posición ante el acceso al mercado de trabajo. Para ello, Cruz Roja tiene que apoyar a identificar el potencial con el que cuenta cada persona, y dedicar esfuerzos al acompañamiento y la formación de una manera intensa, además de buscar procesos de intermediación con empresas de los sectores en expansión.
Para garantizar el éxito de su intervención, se diseña un itinerario personalizado de inserción laboral individualizada, teniendo en cuenta su perfil de empleabilidad, sus intereses y sus expectativas laborales, así como para determinar cuál es su punto de partida y las posibilidades existentes en el mercado de trabajo local.
En este sentido y con el fin de impulsar la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres, se promueve una participación mayor en todas las actividades del itinerario de mujeres frente a hombres con el fin de que éstas consigan al menos los mismos ratios de inserción que en el caso de la población masculina.
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