DETENIDO POR METER UNA CAÑA POR EL ANO A UNA BURRA EN ZARAGOZA

- La Guardia Civil imputa un delito de maltrato animal a un vecino de Borja (Zaragoza). Un vecino de la localidad de Borja (Zaragoza), que responde a las iniciales J. J. Z. M., tiene 42 años y es de nacionalidad española, ha sido detenido por la Guardia Civil como presunto autor de un delito de maltrato animal por causar heridas de pronóstico reservado a una burra al introducirle una caña por el año y la vagina.
El Puesto de la Guardia Civil de Borja recibió una comunicación en la tarde del pasado 24 de agosto de la posible comisión de un delito de maltrato animal ocurrido en una explotación ganadera situada en el paraje denominado ‘Sayón’, en el término municipal de esta localidad zaragozana, según informó este miércoles la Dirección General de la Guardia Civil.
El denunciante comunicó que entre los días 20 y 22 de agosto vio merodear de forma errática a un vecino de Borja, a quien identificó sin ningún género de dudas. Pese a que el terreno se encontraba cercado casi en su totalidad, la zona en la que lo sorprendió no dispone de vallado alguno y esa parte de la finca donde dispone de acomodo de dos burros machos y cuatro caballos.
En la tarde del día 22, el denunciante acudió a su finca para realizar las labores habituales con el ganado y volvió a sorprender al denunciado, en esta ocasión junto a una burra y, al ser advertido de su presencia, huyó del lugar cruzando una acequia cercana y perdiéndose de vista tras atravesar un campo de almendros.
Posteriormente y cuando procuraba dar alimento a los animales, el ganadero se percató de la existencia de sangre en la parte trasera de una de las burras y que, al observarla con más detenimiento, ésta tenía una laceración junto al ano que podría haber sido causada con una caña manchada de sangre y que se encontraba junto al animal, por lo que la introdujo en la cuadra y solicitó la presencia de un veterinario de la ciudad.
En el reconocimiento realizado por la veterinaria, se pudo comprobar la presencia de múltiples heridas en la zona perianal, anal, perivaginal y vaginal, de tipo abierto e incisocontusas, producidas por punción voluntaria y que afectaban a la piel y tejidos subyacentes. A la burra se le diagnosticó pronóstico reservado por las posibles complicaciones de las heridas dada la zona de las lesiones y el ensañamiento con el animal.
A requerimiento de los agentes del Puesto de la Guardia Civil de Borja, al mediodía del 26 de agosto se personó en las dependencias oficiales la persona identificada por el denunciante. Al comunicarle que había sido citado para declarar como persona relacionada o testigo de los hechos, se puso muy nervioso, habló sin parar y reconoció que el 20 de agosto estuvo en la finca y únicamente acarició los genitales de un caballo blanco y de la burra.
Al día siguiente, el denunciado estuvo observando a los animales y el día 22 atravesó un cañar, entró en la finca propiedad del denunciante e introdujo una caña por el ano y vagina de la burra, tras lo cual la acompañó a beber, momento en el que salió huyendo al ser sorprendido por el propietario de la finca.

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