Decenas de seguidores del Estrella Roja de Belgrado fueron detenidos en Zagreb este viernes, horas antes de la disputa del partido de la Euroliga de básquetbol que enfrentará al equipo serbio contra el Cedevita, indicó a la AFP un portavoz de la policía croata.
Los enfrentamientos deportivos entre clubes de estos dos países, enfrentados en una guerra entre 1991 y 1995, son siempre de alto riesgo por el nivel de "hooliganismo" y patriotismo de sus aficiones.
El Cedevita de Zagreb había informado de su intención de ceder los ingresos obtenidos por este partido, que no tiene ninguna repercusión deportiva al estar los croatas ya eliminados, a la reconstrucción de un depósito de agua en Vukobar, dañado por los disparos de la artillería serbia durante el conflicto armado.
Tras la independencia del país, esta infraestructura se ha convertido para los croatas en un símbolo del ataque serbio en 1991 y del asedio sufrido por esta ciudad del este de país por parte de las tropas de Belgrado. Fue uno de los episodios más sangrientos de la guerra serbo-croata.
Un directivo del Estrella Roja, Nebojsa Covic, calificó la iniciativa de su rival de "provocación".
Los hinchas serbios detenidos, algunos de ellos en posesión de artefactos pirotécnicos, fueron trasladados al centro de Zagreb para ser interrogados.
Según la prensa croata, los seguidores accionaron la alarma de un tren que les conducía al pabellón donde debe disputarse el encuentro este viernes por la noche.
Es el último partido de la fase de grupos de la Euroliga y el Estrella Roja ya está clasificado para el Top16.
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