EDUCACIÓN. CENTROS PRIVADOS Y CONCERTADOS DEFIENDEN UNA RELIGIÓN EVALUABLE PERO QUE NO COMPUTE PARA LAS BECAS O LA UNIVERSIDAD

El presidente de la Confederación Española de Centros de Enseñanza (CECE), Alfonso Aguiló, defendió este martes en el Congreso de los Diputados la inclusión de la asignatura de Religión Católica en el currículum académico, pues “la demanda social (en torno a un 63% de familias eligen esta asignatura) así lo indica”.
Ante la comisión parlamentaria en la se busca un Pacto Social y Político por la Educación, Aguiló defendió la enseñanza de esta asignatura, aunque reconoció que “se puede abrir un debate sobre su posible carácter y concepción".
En esta línea, defendió que la asignatura de Religión tenga “carácter evaluable, aunque no sea computable a la hora de solicitar becas o de determinar el acceso a la Universidad”.
Asimismo, manifestó que “deseamos como el que más una excelente enseñanza pública” y reclamó la reversión de los recortes sufridos en ambas redes.
La Constitución garantiza el derecho a la libertad de enseñanza y a la pluralidad, prosiguió, “y para que la educación sea plural debe contar con financiación pública, pues de lo contrario solo será plural para el que pueda pagarla”.
Asimismo, Aguiló reclamó ampliar la cobertura de los conciertos a etapas no obligatorias, como la educación de 0 a 3 o de 16 a 18 años; reforzar la Formación Profesional e insistir en la implantación del modelo dual, y fomentar el aprendizaje de lenguas, nuevas tecnologías y tareas domésticas.
Rechazó que la menor presencia de alumnos inmigrantes en la red concertada se deba a que estos centros ejerzan una suerte de exclusión, y lo achacó a su dependencia de muchos de los servicios complementarios que solo se ofrecen en la escuela pública.
“Si existen unos puntos de diferencia” entre la presencia de estudiantes inmigrantes y la proporción de alumnado general escolarizado en estos centros “es porque los públicos ofrecen la gratuidad de los servicios de comedor y transporte, así como libros y material didáctico gratis y más grupos de desdoble y refuerzo".
Si los concertados contasen con estas ayudas, concluyó, “estarían encantados de recibirlos, y lo haríamos con los brazos abiertos”.

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