El Ministerio Fiscal sostiene que el acusado, sobre las 09.00 horas del día 13 de agosto de 2012, quemó unos rastrojos en su finca de la localidad de La Atalaya, Cudillero, haciéndolo sin adoptar las mas elementales precauciones para evitar que el fuego se propagase, lo cual sucedió desde una de las hogueras hasta los prados colindantes.
La superficie total afectada por el fuego fue de 0,52 hectáreas, con matorral de zarzas. Por Resolución de 8 de junio de 2012, estaba prohibida la quema de rastrojos, restos de limpias de fincas, matorral o cualquier otro producto durante los meses de julio, agosto y septiembre de 2012. Fue necesaria la intervención de Bomberos de Asturias, ascendiendo los gastos de extinción a 1.160, 03 euros.
La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de un delito de incendio forestal por imprudencia grave del artículo 358, en relación con el 352 del Código Penal, y solicita que se condene al acusado a 11 meses de prisión, inhabilitación especial para el derecho de sufragio pasivo durante la condena y multa de 10 meses con cuota diaria de 8 Euros, con responsabilidad personal subsidiaria en caso de impago de 5 meses de prisión. Se solicita igualmente el abono de las costas procesales y el pago de una indemnización de 1.160,03 euros a Bomberos de Asturias.
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