LOS INCENDIOS QUEMAN 10 VECES MENOS HECTÁREAS QUE EN LA ÚLTIMA DÉCADA

Los incendios forestales han quemado un total de 2.710,42 hectáreas forestales en los cinco primeros meses de este año en España, lo que supone casi 10 veces menos respecto al promedio de la última década (26.989,90) y un 78,3% menos en comparación con el mismo periodo de 2015.
Según los datos provisionales proporcionados por las comunidades autónomas al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, recogidos por Servimedia, entre enero y mayo de este año se produjeron 1.616 siniestros forestales, de los que 421 fueron incendios (que arrasaron al menos una hectárea) y 1.195 conatos (con menos de una hectárea quemada).
De las 2.710,42 hectáreas quemadas en ese periodo, que suponen un 0,01% del territorio nacional, un total de 286,16 corresponden a vegetación herbácea (pastos y dehesas) y el resto a vegetación leñosa, concretamente 1.895,02 hectáreas de matorral y monte abierto, y 529,24 de superficie arbolada.
MEJOR DATO EN 10 AÑOS
Se trata de los cinco primeros meses del año con menor superficie forestal incendiada en España del último decenio, por delante de 2013 (8.349,65 hectáreas), 2007 (8.665,11) y 2015 (12.511,69). Los peores fueron 2012 (66.865,73), 2009 (37.941,79) y 2008 (32.258,69). La media de la década asciende a 26.989,90 hectáreas, es decir, casi 10 veces más de lo quemado en lo que va de 2016.
El área mediterránea concentró un 36,51% de los incendios y conatos forestales entre enero y mayo de 2016, en tanto que el resto de siniestros se repartieron entre las comunidades interiores (las provincias de las regiones no costeras, salvo León y Zamora), con un 32,12%; el el noroeste (Asturias, Cantabria, Galicia, País Vasco y las provincias de León y Zamora), con un 29,76%, y Canarias, con un 1,61%.
En cuanto a la superficie forestal arrasada por el fuego, más de la mitad corresponde al noroeste (52,94%), seguido del Mediterráneo (27,06%), las comunidades interiores (19,87%) y Canarias (0,12%).
La superficie arbolada calcinada se repartió mayoritariamente en el Mediterráneo (55,99%), por delante del noroeste (31,92%), las comunidades interiores (11,93%) y Canarias (0,16%).