En una pregunta suscrita por la diputada Inmaculada Nieto, consultada por Europa Press, IULV-CA recuerda que el Parque Natural de los Alcornocales es "la última selva húmeda de Europa" y tiene un enorme valor ambiental en el que el alcornoque juega un papel de primer orden.
Sin embargo, la riqueza forestal de este enclave viene siendo atacada por la seca, cuyos efectos están siendo "sumamente negativos" para este ecosistema. Por ello, la formación política cuestiona a la administración regional por su valoración sobre la afección del fenómeno al patrimonio ambiental del parque, las actuaciones puestas en marcha para combatir sus consecuencias, su evaluación de las mismas y las actuaciones de futuro previstas ante la pérdida de masa forestal.
Ya a principios de 2015, una delegación de Verdemar-Ecologistas en Acción y expertos en el alcornocal se desplazó a Bruselas para llevar un plan de regeneración de los bosques de este espacio, que consideran no es únicamente "un santuario natural", sino que es "el soporte de una economía" que tiene en el corcho su principal exponente, pero también la ganadería, la caza mayor, el ecoturismo o la recolección de diversos productos silvestres.
Sin embargo, alertaban. se ha puesto de manifiesto desde hace algunos años que el actual modelo está entrando en "una fase de agotamiento" y se espera "una verdadera catástrofe ecológica con serias implicaciones económicas de no adaptarse de inmediato una serie de medidas de diversa índole, muchas de ellas competencia exclusiva de instituciones y organismos de la Unión Europea".
Aludían así a la seca, una enfermedad que provoca la muerte de los alcornoques, que, además, no son sustituidos por árboles jóvenes. Exponían que las primeras denuncias públicas sobre este proceso provienen del movimiento ecologista campogibraltareño a finales de los 80. Sin embargo, y pese a los estudios realizados por distintas universidades y organismos científicos, "no sólo no se ha revertido la situación, sino que se ha agravado sobremanera".
Desde aquella fecha, habrían muerto "varios millones de árboles más": el último Inventario Forestal Nacional, realizado en 2007, afirmaba que más de 500.000 alcornoques estaban a punto de morir "en un breve plazo de tiempo".
El Parque Natural de Los Alcornocales tiene una extensión de 167.767 hectáreas y abarca 16 municipios de la provincia de Cádiz y el malagueño de Cortés de la Frontera. Fue declarado espacio protegido bajo esta figura el 28 de julio de 1989, tras la aprobación de la Ley e Inventario de Espacios Naturales Protegidos de Andalucía.
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