La Lección Magistral del acto, que ha tenido lugar este sábado a las 12,30 horas, en la sede del Instituto Internacional San Telmo en Sevilla, ha estado a cargo del director general del Instituto Español, S.A., Vicente Granados, que es también antiguo alumno de esta Escuela de Negocios por partida doble, ya que realizó el Programa PIDE y el Programa de Alta Dirección de Empresas, AD-1.
Tras la bienvenida a los asistentes por parte de Eustasio Cobreros, presidente de la Fundación San Telmo, y la entrega de diplomas por parte de los directores de la XLIII y XLIV edición, Pablo Pérez y Emérito Béjar, respectivamente, llegó el turno de la Lección Magistral.
Según informa el Instituto San Telmo en una nota, Vicente Granados Royo comenzó su intervención agradeciendo al Instituto la invitación para impartir la lección magistral y dando la enhorabuena a los participantes, así como ha compartido con los asistentes los recuerdos de su paso por las aulas del Instituto I. San Telmo, así como su trayectoria profesional.
UNA EMPRESA FAMILIAR DE ÉXITO
Vicente Granados ha hablado del Grupo de empresas 'Granados Royo', compuesto por los cinco miembros de su familia y dedicado principalmente a la fabricación y comercialización de productos de perfumería y cosmética con las empresas Laboratorios Dermo Cosméticos e Instituto Español.
Su intervención la ha centrado en esta última. "Quiero hablaros principalmente de Instituto Español, empresa que dirijo y donde de verdad he podido aplicar lo aprendido en estas aulas", ha dicho.
Para Granados, la empresa tiene que ser un lugar donde la gente vaya a trabajar con ilusión, entusiasmo y alegría; "sólo así sacarán lo mejor de ellos". En esta línea, ha matizado que la plantilla de Instituto Español contaba de 140 trabajadores, de los que el 95 por ciento son mujeres. "Tenemos un horario de 7,00 a 15,00 horas, ya que apostamos por la conciliación familiar".
Ha matizado, además, que la empresa que dirigía tenía una estructura simple, con poco nivel jerárquico, mucho factor humano y fomento de formación interna. "Esto nos hace ser muy flexibles y rápidos en la toma de decisiones", ha destacado.
En referencia al hecho de ser una empresa familiar, Granados ha añadido que este tipo de empresas debían de ser conscientes de "proteger a la empresa de la familia y a la familia de la empresa. Nosotros contamos, para ello, con un protocolo familiar y cuidamos muy de cerca la unión entre nosotros".
Ha hablado también de su padre, del que ha afirmado que para él no existían los limites, sino las limitaciones. "Nos dice que cojamos la maleta y que vayamos a vender, que somos quienes mejor lo hacen porque realmente sentimos lo que hacemos. Es tremendamente gratificante empezar a vender tu producto en un país y verlo en un lineal, en Chile, en Tailandia o en el gran Wall Mart. Os animo a exportar, es apasionante".
Ha aprovechado este momento para agradecerle su padre, presente en el acto, que hubiera confiado en él para dirigir su empresa. "Me dio mi sitio, supo delegar sobre mí la toma de decisiones. De él he aprendido todo, principalmente el concepto de generosidad, de visión, de saber escuchar, de no perder la calma en momentos difíciles y cosas como darle especial importancia al cliente, al empleado y al Cash Flow", ha valorado.
Con humor, Vicente Granados ha concluido su intervención recordando su paso por el Instituto Internacional San Telmo, así como lo aprendido en sus aulas. Finamente, dirigiéndose a los alumnos, les ha aconsejado que se tomaran unos momentos de reflexión para salir de la rutina del día a día.
"Muchas veces no nos damos cuenta, pero lo cotidiano nos saca de nuestros objetivos y de la estrategia marcada. Por todo ello, no olvidad que las circunstancias no deben superaros; que tu pasado no es tu futuro, sino que tu futuro es tu presente y que ahora comenzáis una nueva etapa: aprovechadla", ha señalado.
Rafael Domínguez de Gor, presidente de Mayoral y patrono de la Fundación San Telmo, ha sido el encargado de clausurar el acto.
EL PROGRAMA PIDE
El Programa clausurado está dirigido a empresarios y ejecutivos que ocupan puesto directivos en pequeñas y medianas empresas, con frecuencia de origen familiar, que no necesariamente poseen estudios superiores. Su principal bagaje de conocimientos reside en su experiencia empresarial, que no debe ser inferior a cinco años, acumulados a lo largo de su práctica diaria.
El PIDE tiene como objetivo ofrecer una completa formación empresarial a quienes aspiran a ocupar puestos de mayor responsabilidad en la dirección de las empresas. Se trata de un Programa "único, diseñado para adaptarse a los objetivos y circunstancias que concurren en la pequeña y mediana empresa, y a las características de sus participantes".
De este modo, los profesionales que ingresan en el Instituto para realizar este Programa tienen características comunes entre las que se encuentran "iniciativa, capacidad de esfuerzo, y deseos de asumir responsabilidades y nuevos retos".
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