Esta persona fue investigada por la Patrulla del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil de Brihuega tras estos hechos ocurridos en la madrugada del pasado 18 de Julio, cuando el presunto autor paseaba con su perro suelto y sin bozal por el municipio alcarreño, según ha informado la Delegación del Gobierno en una nota de prensa.
Los agentes del Seprona se dirigieron al domicilio del propietario del perro para recabar la documentación correspondiente, pero no encontrar al animal en la vivienda ya que el dueño lo abandonó para evitar ser localizado, dejando al perro en casa de unos amigos para eludir cualquier tipo de responsabilidad.
Finalmente, los agentes consiguieron localizar al propietario del animal y al perro en la localidad de Marchamalo. Según las investigaciones practicadas se pudo comprobar tras efectuar la lectura del microchip del can que este no figuraba a su nombre, sino al del anterior propietario, careciendo también de licencia para la tenencia de animales potencialmente peligrosos así como del correspondiente seguro obligatorio.
La Guardia Civil instruyó diligencias por la investigación de J.J.G.S., vecino de Marchamalo, que fueron entregadas en el Juzgado de Instrucción en funciones de guardia de los de Guadalajara.
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