Dichas instituciones han determinado, tras un consejo de seguridad de varias horas, que el Frente Primero de las FARC explotó una moto bomba a pocos metros de un colegio de El Retorno, dejando cinco personas heridas, entre ellas un niño y dos policías.
"Por información de Inteligencia del Ejército, por la forma en cómo se presentaron los hechos, hace pensar que este grupo disidente esté detrás de este ataque", ha dicho el alcalde de El Retorno, Óscar Ospina, en declaraciones a la emisora colombiana.
Ospina ha ofrecido una recompensa de diez millones de pesos colombianos (unos 3.000 euros) a cambio de cualquier información que lleve a la captura de los responsables. Para conseguirlo, ha ordenado reforzar la seguridad en el municipio.
El Frente Primero de las FARC anunció el pasado mes de julio su rechazo al proceso de paz con el Gobierno por considerar que "la política del Estado colombiano y sus aliados sólo busca el desarme y la desmovilización de las guerrillas".
En respuesta, el Secretariado de las FARC aclaró que los guerrilleros que no se adhieran a las negociaciones de paz quedarán "por fuera" del grupo armado. "No pueden usar su nombre, sus armas y sus bienes con ningún propósito", subrayó.
Gobierno y FARC se encuentran en la recta final del proceso de paz tras casi cuatro años de diálogo en La Habana los que han conseguido llegar a acuerdos sobre desarrollo agrario y rural, participación política, drogas y víctimas.
Aún quedan por cerrar los acuerdos relativos al fin del conflicto --aunque han alcanzado un pacto sobre el cese de las hostilidades y el desarme-- y a la ratificación, implementación y verificación de lo pactado.
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