Según ha informado la Conselleria de Educación y Universidad en un comunicado, se trata de los datos todavía provisionales ya que cada año a estas solicitudes se deben añadir las que se producen fuera de los plazos establecidos para cubrir las plazas que hayan quedado vacantes.
"Cada curso se hace una valoración de la oferta formativa de FP para adaptarla a las necesidades de los diferentes sectores profesionales de las Islas", ha explicado la Conselleria que añade que esta estrategia "intenta ajustar la oferta, tanto a la demanda de los alumnos, como a las posibilidades reales de realización de prácticas en empresas al acabar la formación en el centro".
La directora general de Formación Profesional, Maria Alorda, ha destacado que se mantiene un "contacto fluido con el sector empresarial de las Islas para incrementar el número de prácticas en centros de trabajo que nos permiten crear más oferta" y, por otro lado, para "definir las necesidades reales de profesionales que tienen las empresas de las Islas para mejorar y ampliar la oferta formativa de Baleares".
En general, la rama sanitaria, la náutico-pesquera, la informática, hostelera y turismo han experimentado una alta demanda durante los último cursos. En este sentido, Alorda ha recordado que "los estudios de FP tienen una excelente inserción laboral y ofrecen una buena vía de formación que está abierta también a personas adultas que quieren ampliar y mejorar sus conocimientos".
Según la directora, "existe una oferta muy variada de estudios que conviene conocerla correctamente porque algunos de los que no tienen una demanda muy alta de matrícula tienen una salida laboral importante".
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