"Desafortunadamente, sufrí una caída mientras entrenaba con una moto de motocross. El dolor en el abdomen y en el pecho es todavía severo. Afortunadamente, mi condición mejora día a día y esto hace que me sienta positivo a la hora de afrontar el Gran Premio de Mugello", señaló Rossi en declaraciones facilitadas por su equipo.
El "deseo muy fuerte" del nueve veces campeón del mundo es el de poder correr en 'casa'. "Estoy trabajando para recuperarme lo antes posible. No será fácil, pero todavía quedan unos días para continuar con el tratamiento", apuntó.
"El jueves, tendré que ir al chequeo médico para recibir el OK e ir a la pista. Si todo está bien, pilotaré mi 'M'1 el viernes para comprobar mi condición. Daré seguro lo mejor de mí el domingo", sentenció 'Il Dottore'.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios