El entrenador del Arsenal, el francés Arsene Wenger, negó este jueves que pusiera en riesgo el estado de salud del atacante chileno Alexis Sánchez el sábado ante el Mánchester United, pese a sufrir una lesión de isquiotibiales durante su compromiso con su selección.
El exdelantero del Barcelona, que logró un doblete con Chile ante Uruguay, disputó el sábado todo el encuentro frente al Mánchester United de José Mourinhno en Old Trafford, que terminó en empate a un tanto.
Esta misma temporada, Sánchez estuvo fuera de los terrenos de juego casi dos meses por una lesión parecida.
Pero el veterano entrenador defendió su política de elección de jugadores tras sugerir que se trataba de una "decisión suicida" que Sánchez jugara con Chile ante Uruguay en la fase de clasificación para el Mundial de Rusia.
"Tuvo unas molestias en los isquiotibiales, pero se le hicieron unas pruebas antes del partido", señaló Wenger.
"Sigo las instrucciones del cuerpo médico y del futbolista. Si lo declaran capaz de jugar y el jugador también... Nunca he forzado a alguien a jugar en mi vida", prosiguió el técnico francés.
"Nunca he pedido a alguien que se inyecte para jugar. Si el jugador está al cien por cien, tomo una decisión. Pero las sugerencias que lo he obligado a jugar son equivocadas, completamente equivocadas", explicó Wenger.
"Tengo el lujo de dar a (Mesut) Ozil un descanso porque Alemania no lo convocó. Sánchez no estaba sobrecargado de partidos antes del United, tampoco jugó en Colombia", añadió el entrenador.
Sánchez, de 27 años, lleva marcados 8 goles esta temporada y podría descansar en el partido del miércoles ante el París SG de la Liga de Campeones.
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