Almería.- Una docena de activistas de Greenpeace afronta hoy su segundo día de encierro en el hotel construido en la playa de El Algarrobico, en el municipio almeriense de Carboneras y situado en el Parque Natural del Cabo de Gata-Níjar, para exigir al Gobierno central y a la Junta de Andalucía su demolición.
La construcción de este complejo hotelero, que cuenta con veinte plantas de altura y se encuentra a escasos metros del mar, está paralizada por orden judicial desde 2005.
La responsable de la campaña de Costas de Greenpeace, Pilar Marcos, ha insistido hoy a Efe en que la exigencia de la organización ecologista es el compromiso "firme y por escrito" de los Gobiernos central y andaluz para la demolición "inmediata" del hotel, de modo que sea rubricado en el Consejo de Ministros del próximo viernes.
Marcos ha asegurado que Greenpeace todavía no ha recibido ninguna comunicación oficial al respecto del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM) ni de la Junta de Andalucía, por lo que proseguirá con sus acciones reivindicativas, entre ellas el encierro de una docena de activistas en el complejo hotelero.
La organización ecologista ha convocado mañana a las 20.00 horas una manifestación en la playa de El Algarrobico para expresar el apoyo social al derribo del complejo hotelero.
Además, los activistas tienen previsto desplegar hoy una gran bola de demolición "simbólica" y continuar con la elaboración de un gran mural en la base del hotel, con ayuda del artista urbano "3ttman", sobre la especulación urbanística y la crisis inmobiliaria, ha explicado Marcos.
La organización ecologista remitió ayer un fax a la ministra del MARM, Rosa Aguilar, y al presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, para pedirles la inmediata demolición del hotel, aunque por ahora dice no haber recibido respuesta oficial.
Greenpeace también reclama al Gobierno andaluz que "se retire de todos los pleitos donde defiende que la parcela de El Algarrobico es urbanizable".
El consejero andaluz de Medio Ambiente, Jose Juan Díaz Trillo, señaló ayer a Efe que la Junta de Andalucía tiene una "posición clarísima" sobre El Algarrobico, al considerarlo un proyecto "insostenible" desde el punto de vista medioambiental y administrativamente "inviable", de modo que apoya su demolición, si bien recordó que existen una veintena de causas judiciales abiertas en torno al hotel.
Greenpeace ha subrayado que "el hotel ilegal en El Algarrobico es un ejemplo claro de la impunidad con la que se ha actuado en el litoral, donde las normativas de protección ambiental se convierten con excesiva facilidad en papel mojado en beneficio de los grandes intereses especuladores", y ha considerado que, "con más de media docena de resoluciones judiciales en contra, la Administración no puede escudarse más en la justicia para no ejecutar el derribo".
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