Al menos 55 milicianos kurdos han muerto en un nuevo bombardeo de la aviación turca sobre los campamentos del grupo armado Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) en el norte de Irak.
Los aviones militares turcos han bombardeado los campamentos kurdos durante la noche del viernes al sábado, según han informado fuentes del aparato de seguridad turco.
Los aparatos han despegado de una base de Diyarbakir, la ciudad más importante del sureste de Turquía de mayoría kurda, y regresaron a la misma sin sufrir daños, han informado las fuentes.
El Gobierno turco inició en 2012 conversaciones de paz con el líder del PKK, Abdulá Ocalan, que está encarcelado en una isla próxima a Estambul, en un intento por acabar con tres décadas de lucha armada que han dejado unos 40.000 muertos y han lastrado el desarrollo del sureste del país, predominantemente kurdo.
El PKK, considerado organización terrorista por Turquía, Estados Unidos y la UE, declaró a continuación un alto el fuego y comenzó a retirarse de Turquía hacia sus campamentos en el norte de Irak, donde tienen sus bases sus milicianos. En las últimas semanas el alto el fuego se ha roto totalmente y el Ejército turco ha bombardeado las posiciones del PKK en el norte de Irak.
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