Alertan de que el embarazo adolescente podría crecer en españa por la crisis

Diversos factores ligados a la crisis económica, como la falta de expectativas en la vida, abandonar los estudios, no tener trabajo o la búsqueda de una señal de identidad en un bebé, pueden hacer que esté aumentando en los últimos años la cifra de chicas españolas menores de 18 años que experimentan la maternidad.
La ginecóloga Isabel Serrano, miembro de la Junta Directiva de la Federación de Planificación Familiar Estatal (FPFE), hizo esta afirmación en una rueda de prensa en Madrid con motivo de la presentación del informe ‘Estado de la población mundial 2013’, del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFA, según sus siglas en inglés), centrado este año en el embarazo en adolescentes.
Este estudio concluye que alrededor de 20.000 niñas menores de 18 años y residentes en países en desarrollo dan a luz cada día (es decir, unos 7,3 millones al año), de las cuales un 27,4% (dos millones anualmente) lo hacen sin haber cumplido los 15 años.
Serrano apuntó que este “verdadero drama mundial” también causa “preocupación” en países desarrollados como España. “Aquí y allí da lo mismo y todo esto tiene que ver con la pobreza y el nivel educativo”, añadió.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), un total de 3.289 niños de madres de hasta 17 años nacieron en España en 2011, de los cuales 145 tuvieron como progenitora a una menor de 15 años. Un tercio de estos nacimientos se produjeron con mujeres inmigrantes, un 13% de las cuales estaban casadas (por el 6% de las españolas).
"LA FANTASÍA DE SER MADRE"
Serrano explicó que diversos factores influyen para que una niña o adolescente “sea madre a la edad de ser hijas y no otra cosa”: la situación social, las vivencias o deseos personales, las “competencias personales para poder negociar y evitar esas situaciones” y las relaciones afectivas de pareja.
En este sentido, apuntó que, debido a la crisis económica, las cifras del embarazo adolescente en España “pueden incrementarse en estos años y casi no nos estamos dando cuenta”.
Por ejemplo, indicó que el contexto social en España “es malo”. “Muchas chicas no están estudiando o están dejando de estudiar, en el contexto familiar hay otras prioridades en las que centrarse y se da un valor a la maternidad que puede hacer mella en algunas chicas jóvenes”, apostilló.
Sobre las vivencias personales, comentó que “la fantasía de ser madre crece en momentos de mayor pobreza y crisis” en las adolescentes que no cursan estudios y que, ante la falta de perspectivas de futuro, pueden “tener el foco puesto en un bebé como algo de identidad para ellas”.
En las competencias personales, señaló que “la situación económica hace que se esté quitando mucha importancia a proyectos y programas de educación sexual para la gente joven y el acceso a los métodos anticonceptivos está disminuyendo”, mientras que, desde el punto de vista de las relaciones afectivas, “chicas muy jóvenes pueden tener la fantasía de que la relación sentimental que mantienen con una persona va a ser para toda la vida”.