Aprueban plan para construir un barrio árabe en la parte Este de Jerusalén

  • El Ayuntamiento de Jerusalén ha aprobado un plan para construir un barrio árabe en Jerusalén Este, tras años de férrea oposición de los sectores ultranacionalistas, que aspiran a incrementar la presencia judía en esa zona reclamada por los palestinos como capital.

Jerusalén, 4 sep.- El Ayuntamiento de Jerusalén ha aprobado un plan para construir un barrio árabe en Jerusalén Este, tras años de férrea oposición de los sectores ultranacionalistas, que aspiran a incrementar la presencia judía en esa zona reclamada por los palestinos como capital.

La Comisión de Planificación y Construcción Local del consistorio decidió el miércoles poner en marcha el proyecto, el primer paso previo a la construcción del barrio Arav al Swahara, que incluye 2.500 viviendas sobre unas 150 hectáreas de terreno, dijo hoy a Efe Pepe Alalo, concejal del partido pacifista Meretz en Jerusalén.

El proyecto fue presentado hace más de cinco años al Ayuntamiento y fue entorpecido sucesivamente por miembros de la derecha, lo que hasta la fecha había impedido siquiera que fuera analizado.

Ciudadanos palestinos interpusieron una demanda ante el Tribunal Supremo israelí con el objeto que se estudiara el proyecto y, tras un dictamen favorable a los querellantes, el alcalde se vio obligado a estudiarlo y someterlo a votación.

Alalo lamentó que, pese a que se ha dado luz verde al mismo, "los sectores más derechistas tratarán de rebajar el número de viviendas y aún queda mucho hasta que podamos ver que comienzan las obras".

Con todo, calificó la medida de "un paso positivo aunque con matices" y explicó que el plan general proyecta edificar en un área aledaña a la aldea palestina de Tzur Baher y el barrio judío de Talpiot Este, ambos en el territorio ocupado por Israel en 1967.

El alcalde de Jerusalén, Nir Barkat, alabó la decisión y dijo que "la planificación de barrios en Jerusalén Este por la Municipalidad es una clara expresión de la soberanía de Israel sobre todas las partes de la ciudad y refuerza la unidad de Jerusalén".

Israel se anexionó en los años ochenta la parte oriental de la urbe, que considera su capital y del pueblo judío, además de "eterna e indivisible", pese a que la comunidad internacional no la reconoce como tal.

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