Un detenido

Las víctimas del presunto asesino en serie de Barcelona no tenían relación

Caravana en la que vivía el presunto asesino en serie de Barcelona
Caravana en la que vivía el presunto asesino en serie de Barcelona
EFE

Los Mossos d'Esquadra investigaban a contrarreloj para dar caza al presunto asesino en serie de Barcelona que puede estar detrás del asesinato de al menos tres personas que vivían en la calle, la última ayer, en pleno confinamientoAprovechaba la madrugada para actuar. Su modus operandi: golpearles con una violencia "desmedida y gratuita" en la cabeza hasta quitarles la vida. Desde hace una semana los agentes le estrechaban el cerco a este hombre de 35 años y  nacionalidad brasileña pero cuyo último domicilio estuvo en Portugal. Una llamada al 112 de un vecino fue la que precipitó su arresto mientras huía del último escenario del crimen en la calle Roselló de Eixample. Utilizando el transporte público logró llegar hasta su caravana en Les Planes (Sant Cugat del Vallès) donde se busca cualquier indicio que le relacione con los últimos tres asesinatos de unas víctimas vulnerables a las que se les advirtió hace una semana que las calles estaban siendo más vigiladas e intentaran dormir más agrupados. También les enseñaron una foto del presunto asesino. Los asesinados no tienen ningún vínculo. 

La Fundación Arrels ha colaborado con los Mossos en una investigación que se intensificó desde que el pasado 16 de abril un hombre de poco más de 20 años apareciera muerto de un fuerte golpe en la cabeza en la calle Lepanto, junto al Auditori. "Nunca nos hemos enfrentado a nada igual", aseguran a La Información desde esta fundación. Ellos fueron alertando a los sin techo que durante el confinamiento "se hacen más visibles y vulnerables porque son los únicos que están en la calle" de que extremaran las precauciones. Ninguna de las víctimas habría querido ir a los pisos o locales que se les ofrecía desde esta asociación -residencias 24 horas, pisos de alojamiento nocturno- en la que sienten alivio porque el presunto asesino en serie de mendigos de Barcelona está detenido pero que al mismo tiempo recuerdan que "las personas que viven en la calle dormirán esta noche sin un techo con lo que ello supone". 

El intendente de los Mossos d'Esquadra Joan Carles de la Granja, jefe del área de Investigación Criminal, comparecía ayer junto al conseller de Interior, Miquel Buch, después de que la madrugada del pasado martes detuvieran al sospechoso con un antecedente por un delito contra el patrimonio y quien pudiera sufrir "alguna dificultad mental". Sin reconocer los hechos, los investigadores han podido hablar con él y pese a que ha contestado a algunas preguntas han comprobado que tiene un discurso "a veces un poco incoherente".

Tras la primera víctima del 16 de abril, en menos de 36 horas los Mossos se enfrentaron a otro escenario idéntico de otro sin techo aseseinado por la noche en el barrio del Eixample -en la calle Casp-, ante lo que los Mossos abrieron una investigación prioritaria porque "había en juego vidas humanas". Utilizaron las imágenes de las cámaras de seguridad para intentar obtener alguna imagen del sospechoso y dieron a este caso un carácter prioritario al ser las víctimas de un colectivo vulnerable, "invisible para la sociedad". Además, constataron que el asesino no daba ninguna oportunidad a la víctima para poder defenderse.

Por desgracia, como reconocen desde la asociación, "al final ha tenido que morir otra persona" y fue la llamada de un vecino la que alertó que alguien estaba pegando a un mendigo en la calle Sordenya la que cerró más el círculo sobre este posible asesino en serie que tenía atemorizados a los vecinos de Barcelona. Ahora, con el caso en secreto de sumario, aún no se descarta que sea el autor del primer asesinato de un mendigo en la calle Sanderya el pasado 19 de marzo, pero no encajaría con su modus operandi ya que presentaba heridas de arma blanca. La muerte tuvo lugar después de una pelea entre dos indigentes.en las puertas de un supermercado. La Guardia Urbana arrestó a una persona, pero quedó en libertad por falta de pruebas. Lo que encuentren en su caravana, hasta donde condujo a los investigadores mientras huía del último escenario del crimen puede que arroje luz sobre este caso también. 

La investigación aún sigue abierta, entre otros aspectos para determinar si el detenido también cometió el primer asesinato, del 18 de marzo, y si le constan antecedentes por ataques a personas pobres y sin hogar en Portugal o Brasil, porque hasta el momento en las bases de datos en España sólo figuraba una detención en Zaragoza, por parte de la Guardia Civil, por un delito contra el patrimonio.

Mostrar comentarios