C. Valenciana. Aerte propone un grupo de coordinación socio-sanitaria con administración y empresarios

La Asociación Empresarial de Residencias y Servicios a Personas Dependientes de la Comunidad Valenciana (Aerte) aboga por la creación de un grupo de coordinación socio-sanitaria participado por la administración y por representantes empresariales, para conseguir una mejora de la gestión sin recortar en servicios.
La idea es, según el presidente de la agrupación, Alberto Giménez, implantar políticas "concretas" de mejora de la gestión, sin acudir al recorte de servicios y sí, por ejemplo, a la eliminación de los que están duplicados.
En este sentido, Giménez señala que la coordinación socio-sanitaria es un elemento "clave" en el medio plazo para conseguir "más eficiencia en el sistema", pues supone abordar de una vez una serie de asuntos "altamente generadores de gasto público y pendientes de resolución durante largo tiempo".
Desde esta perspectiva, Aerte considera "imprescindible" crear mecanismos "estables" de comunicación y colaboración entre los diferentes departamentos de la Administración implicados, las distintas administraciones entre sí, y los operadores.
Estos mecanismos, explica, pueden tener forma de grupo o comité de actuación, con una agenda definida para analizar las propuestas económicas que reduzcan el impacto de los servicios sobre las arcas públicas, "pero con la voluntad de fomentar la eficiencia y no el recorte".
Por otra parte, el presidente de Aerte recuerda que los estudios realizados por la patronal, ya presentados a las administraciones, indican que la ocupación de una plaza por un dependiente grave o severo en un centro tiene unos retornos positivos sobre el gasto de más de 7.000 euros anuales por plaza, como consecuencia de la creación de empleo y los efectos fiscales.
A este ahorro, asegura, hay que añadirle el que se genera en gasto farmacéutico y sanitario por la atención profesionalizada a la persona dependiente.
Además, Giménez defiende el desarrollo del catálogo de servicios de la Ley de la Dependencia y, especialmente, la regulación del Servicio de Ayuda a Domicilio (SAD).
Finalmente, el responsable de Aerte avanzó algunas de las medidas que defiende el programa de reformas impulsado por la aentidad, que apuesta así por la expedición de medicamentos directamente en las residencias, a través de profesionales farmacéuticos, lo que estima que supondría un ahorro de cerca de 20 millones de euros.
En la misma línea, el portavoz de la patronal aboga por potenciar los servicios sanitarios en los centros geriátricos, dado que evitaría desplazamientos de los mayores a los hospitales, con lo que se reduciría el gasto sanitario por la utilización de ambulancias y los costes hospitalarios de los servicios de urgencia.