"Por suerte, los propietarios miraron dos veces esta mañana antes de saltar a la piscina", dijo la oficina del sheriff en un post de Facebook. Y es que en ella había un invitado especial: un caimán de algo más dos metros de longitud (entre 7-8 pies).
Al parecer, las altas temperaturas llevaron al caimán a refugiarse en la piscina familiar. Las autoridades ambientales controlaron al animal, que estaba un poco violento, y lo trasladaron a un lugar seguro. La oficina del sheriff compartió el vídeo del momento en el que el cocodrilo fue sacado de la piscina.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios